Janet Jackson rompe su matrimonio tres meses después del nacimiento de su hijo

La cantante dio a luz a su primer hijo con 50 años el pasado 3 de enero

Por hola.com

Janet Jackson ha roto con su marido, el multimillonario catarí Wissam Al Mana, tan solo tres meses después del nacimiento del primer hijo de la pareja, tal y como ha confirmado Us Weekly. De acuerdo con la página PageSix se trata de una ruptura amistosa y, aunque vivirán separados, continuarán ejerciendo como padres de su hijo Eissa

VER GALERÍA

El pasado 3 de enero Janet Jackson daba a luz a su primer hijo a los 50 años. Desde entonces la cantante se había recluido para ejercer su papel de madre. Durante su relación y posterior embarazo apenas se había dejado ver en público y aunque la diva del pop no había confirmado haberse convertido al islam la hemos visto vestir con el hiyab o velo islámico.

Según fuentes cercanas a la cantante Al Mana se había vuelto “demasiado controlador” llegando a intervenir en como debía vestir Jackson durante sus conciertos. "La estaba volviendo loca y la estaba separando de sus fans", asegura una de las fuentes del citado portal, que confiesan que la cantante, cansada de ciertos comportamientos de su marido, es quien habría tomado la decisión de separarse.  

VER GALERÍA

Janet Jackson se casó en secreto hace cuatro años con Al Mana, a quien conoció en 2010 en la inauguración de un hotel en Dubái. Este será el tercer divorcio para la cantante, después de haber estado casada con el cantante James DeBarge en 1984, cuya unión se rompió tan sólo un año después,; y con el bailarín Rene Elizondo, con que el que contrajo matrimonio en 1991 y del que se separó en el año 2000.

Aunque son pocos los datos que se conocen del empresario catarí de 42 años, Al Mana reside en Londres y posee una fortuna de 1 billón de dólares (unos 960 millones de euros). Wissam Al Mana es director ejecutivo y copropietario de Al Mana, negocio familiar que cuenta con 55 empresas dedicadas a diferentes actividades profesionales como las inversiones y los bienes raíces, medios de comunicación o sectores como la venta de artículos de lujo, belleza y moda.  Está al frente de un imperio que controla las tiendas de Zara, Mango o Harvey Nichols en Oriente Medio, y marcas como Hermès o Alexander McQueen.