Ha encontrado un nuevo camino profesional, alejado del que había seguido durante los últimos años. Rosa Benito se subió a un escenario el pasado mes de febrero para acompañar a su hija Rosario en uno de sus conciertos del espectáculo En vivo, un montaje en el que comparten cartel con Carlos Vargas. Entonces aseguró que “era algo que nunca imaginó que iba a hacer ya que ella siempre había estado entre bambalinas”. Sin embargo, esta aventura se ha convertido en algo más y ahora ocupa todo su tiempo.
“Estamos contentos, estamos trabajando y gracias a Dios tengo otra salida. Mi hija me lo propuso y para mí ha sido muy bueno, porque si me hubiese quedado en mi casa, sí hubiese tenido un problema. Pero gracias a Dios tiro para adelante” comentó Rosa. Hasta hace un par de meses, colaboraba en el programa de televisión Sálvame, una andadura que finalizó por un “desencuentro con la cadena”, tal y como dijo la presentadora del espacio este verano Paz Padilla. Otros colaboradores apuntaron a que se trataba de un desencuentro por cuestiones legales (en la revista ¡QMD! se publicó que tenía que ver con una demanda interpuesta por el marido de Rosario Mohedano).
Rosa aclaró que “echa de menos el programa, porque ella le ha dado mucho y el espacio también le ha dado mucho a ella”, pero que “la invitaron a irse”. “Hoy hace dos meses que me dijeron: ‘O haces esto o pasa esto’. Y dije bueno, pues pasa esto” explicó sin entrar en detalles sobre lo sucedido. Ajena a los comentarios, Rosa disfruta del verano y de su nueva aventura en la música. “No estoy viendo el programa. Me bajo a la piscina, me voy a hacer mi relajación de mis cosas de budismo y estoy bien. Creo que lo necesito”. Comentó además que no tiene intención de volver por ahora. “Ya no voy a volver, yo estoy feliz con lo que estoy”.
Rosa Benito se atreve con la música: 'Es algo que jamás imaginé que iba a hacer'
La cuñada de la recordada Rocío Jurado ya estuvo una temporada alejada de las cámaras en el año 2014, cuando dejó la televisión durante más de tres meses e ingresó voluntariamente en una clínica de Madrid. “Necesitaba separarme de todo” relató a su vuelta. Tras su divorcio de Amador Mohedano, después de 36 años de matrimonio, pasó por un momento anímico delicado por lo que se tomó un tiempo para dedicarse a ella misma. Tras estas semanas, volvió a su trabajo en televisión, a la que ahora, según dice, parece haber dado un adiós definitivo.
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