Ibiza está siendo testigo del verano más especial de Esther Cañadas. La modelo disfruta en la isla balear de sus primeras vacaciones estivales como mamá de Galia, una preciosa niña que se ha convertido en el centro de su vida y de quien no se despega en ningún momento. Ni para ir de compras ni al acudir al gimnasio.
La guapa modelo siempre ha destacado por su espectacular físico, y a pesar de haber sido mamá hace apenas siete meses, se ha recuperado muy deprisa. Con un ‘look’ muy deportivo, pantalón corto negro y camiseta de tirantes naranja, Esther lució una increíble figura al salir del gimnasio junto a su hija y una niñera que la ayuda en el cuidado de la pequeña.
Apasionada del mar, Esther ha querido que su hija, a la que mima y cuida con esmero, conozca la playa y disfrute de la paradisíaca isla que tanto gusta a su mamá. No es la primera vez que elige Ibiza para pasar sus vacaciones, pero esta vez todo es muy diferente, pues es la primera en la que está acompañada por su pequeña. Así, todo son emociones y felicidad para la modelo, que disfruta de un momento inolvidable en su vida.
Fue el pasado mes de diciembre cuando Esther, de 37 años, dio la bienvenida a su primera hija, cumpliendo por fin su sueño de ser mamá. La niña, a la que puso el nombre de Galia Santina, nació en la clínica Ruber de Madrid. Unos meses antes, en julio, la revista ¡HOLA! confirmaba el embarazo de quien fuera una de las grandes 'tops' internacionales, que cumplía así su sueño de ser madre tras superar una larga enfermedad del sistema inmunológico, que le obligó a estar medicada con cortisona durante cinco años.
- En ¡HOLA!: Esther Cañadas espera su primer hijo, tras superar una larga enfermedad
- Exclusiva en ¡HOLA!: El bebé que espera Esther Cañadas es una niña
- Esther Cañadas da a luz a su primera hija, Galia Santina
Se desconoce la identidad del padre de su pequeña, y es que nada se ha sabido de la vida sentimental de la modelo desde que, en septiembre del año pasado, rompiera su compromiso con Vikram Chatwal. Tras su divorcio de Mark Vanderloo en el año 2000, y del exmotociclista Sete Gibernau, en 2008, la modelo se comprometió con el magnate hotelero, con quien rompería inesperadamente meses después. Esta ha sido la última relación conocida de Esther, quien ahora solo tiene un amor: su hija.
