Tanto ellos como sus respectivas familias están encantados con la buena nueva: Víctor Janeiro y Beatriz Trapote esperan su primer hijo para el mes de noviembre coincidiendo con su segundo aniversario de boda, que ¡HOLA! mostró en exclusiva. Es, sin duda, el mejor regalo para el matrimonio que desde hace tiempo deseaba formar una familia. “La última ecografía me la hice la semana pasada y el médico me confirmó que todo va fenomenal”, asegura la periodista a HOLA.com.
A punto de cumplir las nueve semanas de embarazo, Beatriz contagia su alegría al hablar del momento que está viviendo. “Es un niño muy buscado – nos dice -, desde que nos casamos en 2013 estábamos intentando ser padres pero el bebé no llegaba”. La pareja decidió entonces someterse a un tratamiento de fertilidad en una clínica de Jerez, que en el segundo intento ha dado sus frutos.
Aunque explica que el proceso “ha sido duro” el resultado no podía ser más satisfactorio. “Hay gente que se somete a tratamientos de fertilidad y no quieren hablar abiertamente de ello pero yo no tengo ningún problema. Creo que contando mi experiencia puedo ayudar a otras mujeres que están atravesando la misma situación”.
El futuro papá no puede estar más feliz, “nos sentimos los dos muy embarazados – cuenta con humor-. Él está muy pendiente de mí”. Y como buen torero ha echado mano de sus amuletos, por muy sui géneris que parezcan, para que todo fuera bien. “Le veía todo el día con un sobrecito de azúcar en la mano, le preguntaba para qué era y me decía: 'Ya verás como nos va a dar suerte”.
Beatriz, quien se encuentra muy bien aunque sufriendo las típicas náuseas de su estado, asegura que no tienen preferencia por el sexo del bebé aunque a renglón seguido reconoce que “si es niño a Víctor se le cae la baba”. Eso sí, recuerda que entre los toreros predominan los padres de niñas: Francisco Rivera, Enrique Ponce, Oscar Higares...
Volcada en su faceta de empresaria – tiene tres franquicias de manicura Nails Factory, una en Madrid y dos en Andalucía, y proyecta abrir una cuarta –, la mujer de Víctor Janeiro se siente muy respaldada por su familia política, a la que tiene más cerca desde que se mudó a vivir a Jerez de la Frontera. “Ellos están muy contentos. Jesús ya quería sobrinos, y Carmen y Humberto también están encantados”.
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