La boda escocesa de Andy Murray y Kim Sears

Martina Klein y Alex Corretja estaban en la lista de invitados de la ceremonia

Por hola.com

Por fin ha llegado el gran día para Andy Murray y Kim Sears. Este sábado, la pareja ha celebrado su boda en Dunblane (Escocia), su tierra natal. Andy y Kim se han convertido en marido y mujer en una ceremonia tradicional en la que cada detalle tenía un toque clásico escocés, incluído el traje del novio con el inconfundible estampado de cuadros verdes y azules.

VER GALERÍA

Por su parte, la novia llegó a la ceremonia en un coche plateado y luciendo un precioso vestido con volumen en la falda y pedrería en la parte superior, con manga tres cuartos y escote en forma de uve en la espalda, además de una diadema a juego. Los novios fueron recibidos por decenas de personas a la entrada del templo, donde pronunciaron sus votos antes de celebrar el enlace en una reunión íntima con familiares y amigos. Ninguno de los dos pudo ni quiso ocultar su felicidad al pasear con una enorme y radiante sonrisa ante sus invitados y los cientos de curiosos que se acercaron para presenciar el momento.

VER GALERÍA

Ha sido una ceremonia romántica y cuidada hasta el último detalle, pero íntima, discreta y sin estridencias mediáticas, igual que su relación. Andy y Kim han preferido darse el "sí, quiero" ante un círculo reducido de amigos cercanos y familiares. En esta breve lista de invitados se incluían el ex tenista Alex Corretja y su pareja, la modelo Martina Klein, que han posado muy guapos y sonrientes, ella con un sencillo pero favorecedor vestido azul petróleo. También acudió el exnúmero uno del tenis británico Tim Henman.

Era casi una obligación que Andy y Kim celebrasen su boda en Dunblane. Concretamente la Catedral de Dunblane, con capacidad para aproximadamente 300 personas, ha sido el escenario en el que la pareja se ha dado el "sí, quiero". Desde el viernes, en los alrededores del lugar se podía ver cómo se preparaban para la boda llevando hasta allí algunos objetos y adornos florales. Tras la ceremonia religiosa, los recién casados y sus invitados se trasladan al Hotel Cromlix House, en Murray, Dunblane. Esta mansión victoriana construida en el siglo XV y que el tenista convirtió en 2013 en un hotel de 5 estrellas es el lugar que los novios escogieron para la recepción.

VER GALERÍA

El tenista confesó recientemente que había dejado en manos de su futura esposa casi todos los aspectos de la organización de la boda, excepto una cosa: el banquete. "La buena comida es algo que me gusta", aseguraba, y para satisfacer las exigencias de su paladar ha confiado en el chef Michel Roux Jr, que habló en exclusiva para HELLO! online asegurando que "la comida sería deliciosa". Él y su padre, Albert Roux, supervisan el restaurante Chez Croux, que se ubica precisamente en el Hotel Cromlix House. No sólo servirán allí el banquete, sino que, además, los platos han sido elaborados allí mismo. Eso sí, el menú continúa siendo un misterio, aunque no hay duda de que dejándolo en manos del chef que abrió junto a su hermano Le Gavroche en 1967 y consiguió que fuera el primer restaurante en Gran Bretaña con tres estrellas Michelin, habrá estado a la altura. Además del aspecto gastronómico, Andy se ha encargado de la música que sonará en la ceremonia.

Andy Murray es motivo de orgullo para su localidad natal, además de una gran estrella a nivel internacional. No es de extrañar que su boda se haya convertido en el gran evento de la temporada en Dunblane, que se ha engalanado para vivir el fin de semana del enlace como merece. Entre las calles cortadas por la aglomeración mediática, tiendas, restaurantes y muchos más establecimientos han decorado sus instalaciones para la ocasión, con fotografías de la pareja y cariñosos mensajes adornando escaparates y mostradores. Incluso las carnicerías se han apuntado a la tendencia de personalizar todo en base a la gran boda, convirtiendo la ciudad en una mezcla de imágenes muy emotivas con otras con las que es imposible contener la sonrisa.

VER GALERÍA

La "primera dama" del tenis, como fue apodada cuando Andy se convirtió en el primer tenista británico en ganar el tradicional torneo de Wimbledon después de casi ocho décadas, tiene 27 años y trabaja pintando retratos de mascotas. Hija de Nigel Sears y de Leonore, de origen sudafricano, Kim se educó en West Sussex, donde destacaba por sus altas notas en arte y en interpretación, y al graduarse decidió estudiar literatura inglesa en la universidad de Suss. No sólo puede presumir de tener una carrera que triunfa en Londres, sino también un físico envidiable y constantemente alabado, logrando superar a Jelena Ristic o María Francisca Perelló en la votación de la 'WAG' del tenis con el pelo más bonito, con esa melena que vemos siempre al viento en las gradas de los estadios a los que acude para animar a su ya marido.

Algunos compañeros de profesión de Andy, como Feliciano López, le dedicaron mensajes de enhorabuena en las redes sociales. La ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, se sumó a esas felicitaciones y envió su "más calurosa enhorabuena" a la pareja. "Les deseo lo mejor para una vida larga y feliz juntos. Andy es el héroe local en Dunblance y una superesrella escocesa del deporte", dijo la líder del Partido Nacionalista Escocés (SNP).

Una historia de amor de diez años
Andy y Kim se conocieron en el año 2005 cuando ella viajaba acompañando a su padre, Nigel Sears, entrenador de tenis. No tardó en surgir la chispa y comenzó un romance que llevaron con la máxima discreción hasta que su relación saltó al público, declarando así su amor en una bonita historia que ha puesto su broche de oro con la boda.