Entonces… ¿Es blanco y dorado o azul y negro?

La historia de una discusión familiar por el color de un vestido que se convierte en el último fenómeno viral y la explicación científica de por qué no nos vamos a poner de acuerdo

Por hola.com

Si a estas alturas del día no sabes de qué color es el vestido, no te sientas un bicho raro, nosotros te lo contamos. En España dormíamos plácidamente ajenos al sorprendente debate que se iniciaba en Escocia, para cruzar a Estados Unidos y allí extenderse por todo el planeta en cuanto las celebrities entraron al trapo. La fotografía de la famosa prenda se ha compartido a través de las redes sociales y mensajes telefónicos, iniciando discusiones que han llevado a que #TheDress sea trending topic a nivel mundial.

Todo comenzó cuando una usuaria de la Tumblr pidió ayuda a sus seguidores para saber de qué color era el vestido que salía en la foto: “Chicos, por favor, ayudadme. ¿Este vestido es blanco y dorado o azul y blanco? Mis amigos y yo no nos ponemos de acuerdo”.

Cuando el portal BuzzFeed – una empresa de medios de comunicación de Internet estadounidense, que se creó en el año 2006 como laboratorio de viralidad- recogió su pregunta, el debate se hizo imparable. Algunas estrellas de cine y celebrities con millones de seguidores -como Julianne Moore, Taylor Swift, Kim Kardashian, Sarah Hyland, Alyssa Milano, Jaden Smith o Anna Kendrick- entraron a opinar sobre el color del famoso vestido, sirviendo así de altavoz y multiplicando su efecto. El último fenómeno viral ya estaba montado.

La noticia inicial sobrepasa ya los 24 millones y medio de visualizaciones –para felicidad del portal de noticias que ha dado la enhorabuena a sus trabajadores vía Twitter-, se han creado votaciones, dos equipos enfrentados por el color y el hashtag #TheDress continúa doce horas después en la primera posición de las tendencias globales en Twitter.

La presentadora estadounidense Ellen Degeneres lo ha definido perfectamente en su cuenta: "Hoy el mundo esta dividido en dos: blanco y dorado o azul y negro". Mientras la cantante Taylor Swift se declaraba "confusa y asustada" ante el fenómeno, cientos de memes inundaban las redes relacionando al fenómeno viral con las noticias del día, así fue como las llamas fugadas de un rancho de Arizona "corrían" con el vestido puesto.

La explicación
Cuando los debates se empezaron a acalorar y los más alarmistas mencionaban el daltonismo, se ha preguntado a la comunidad científica. El medio especializado en ciencia Wired ha publicado un artículo en el que achacan la división de opiniones a la percepción de la luz y al modo en el que el cerebro interpreta contextualmente la información.

Según cuenta Bevil Conway, una neurocientífica del Wellesley College, a la citada publicación viendo la fotografía "los ojos tratan de compensar la iluminación del fondo con el color del objeto principal, el vestido. Algunos ojos eliminan el tono azul y ven la prenda dorada y blanca, mientras que otros eliminan los tonos luminosos del fondo y ven el vestido azul y negro".

Del mismo modo se recuerda que cuando miramos un objeto, el color que percibimos en ese momento puede variar dependiendo de la intensidad y el tipo de luz, motivo por el cual al anochecer los colores parecen diferentes de cuando los vemos a la luz del sol y también son distintos dependiendo de que utilicemos luz natural o artificial.

Y a todo esto… ¿de quién es el vestido?
La persona en cuestión que inició la pregunta en Tumblr, es Caitlin McNeill, una chica escocesa de 21 años y miembro de una banda folk. La joven y su grupo fueron invitados a tocar en la boda de unos amigos. La dueña del vestido era la madre de la novia.

El debate ya se había iniciado a nivel familiar una semana antes de la ceremonia, cuenta la propia protagonista en BuzzFedd, cuando la dueña del vestido envió la famosa fotografía a su hija para enseñarle la elección para el gran día. Para sorpresa de los novios, cada uno veía el vestido de un color diferente. Así que comenzaron a pedir opinión, a Caitlin McNeill incluida.

La celebración llegó, el vestido en persona era negro y azul y la cosa podía haber quedado allí de no ser porque Caitlin seguía con la intriga, así que decidió preguntar a sus seguidores de Tumbler… El resto de la historia es vox populi.

Aunque por despejar las últimas dudas que pudieran quedar, la firma del vestido -o al menos la firma que cita el medio que inició el fenómeno viral, ya que ahora diversas marcas se disputan la autoria- ha querido aclarar una cosa: "¡El vestido es azul y negro!"