Las versiones con frutas de los clásicos gazpachos y salmorejos veraniegos resultan una gran alternativa a la hora de preparar estas sopas frías. En este caso empleamos la sandía cono producto principal para hacer un salmorejo al que vamos a dotar de un alegre toque picante gracias al empleo de guindilla roja fresca.
- 800 g de Sandía
- 200 g de Tomates pera
- 0.5 Pimiento rojo
- 2 Guindillas rojas frescas
- 6 rebanadas de Baguette
- 80 ml de Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta
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1.
Lavar los tomates, pelarlos y trocearlos.
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2.
Retirar la piel y las semillas a la sandía y trocearla.
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3.
Desechar el tallo y las semillas del pimiento y trocearlo.
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4.
Retirar el tallo a las guindillas y cortarlas en trocitos de 1 cm.
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5.
Tostar las rebanadas de pan en una tostadora.
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6.
Poner en la batidora la sandía, los tomates, el aceite y una pizca de sal y triturar hasta obtener un compuesto denso.
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7.
Repartir el salmorejo en cuencos individuales, acompañar con el pan tostado y los trozos de guindilla y espolvorear la pimienta recién molida.
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