Un paseo por la orilla del mar puede sonar a verano. Un remojar de pies, mucho más. Pero venimos aquí dispuestos a romper mitos. A demostrar que, a veces, las cosas pueden ser muy diferentes a lo que imaginamos. Eso sí, después del primer contacto con el Mediterráneo, no estará de más empaparse de ese ambiente navideño que, también aquí, en el sur, late con fuerza. La Costa del Sol se viste de luces, y lo hace a lo grande, desbordando esa elegancia y poderío que tanto y tan bien la definen.
© ShutterstockNos plantamos, para elevar el disfrute a las cotas más altas, en pleno corazón marbellí, donde la popular Plaza de los Naranjos —a rebosar por estas fechas de frutos—, se animan conquistadas por el talante festivo, la decoración navideña y los villancicos sonando por doquier. Inspira bien fuerte el aroma a castañas asadas y pasea por las enrevesadas callejuelas del casco histórico, donde no faltan los belenes y adornos decorativos. Este año han sido iluminadas con detalles navideños hasta 120 calles de la ciudad. Se debe continuar hasta alcanzar el Paseo de la Alameda, donde participar de las tradicionales zambombas y buñueladas que se celebrarán a lo largo de los días de fiesta.
Mercadillos con glamur
No nos vamos a engañar: un mercadillo navideño siempre insufla de espíritu festivo estas fechas. Por eso, en Marbella no escatiman año tras año en organizar los mejores y más esplendorosos. Uno de ellos, además, ha sido incluido recientemente en la lista que destaca los mejores de Europa, así que, ¿cómo perder la oportunidad de visitarlo? Se trata del que se celebra en Puerto Banús, donde decenas de pequeñas cabañitas de madera albergan puestos colmados de productos gourmet, artesanía local y potenciales regalos con los que sorprender a los seres más queridos. De extra, un paseo —con las compras bajo el brazo– por sus boutiques de lujo y sus míticos muelles, donde atracan durante todo el año los yates y barcos de recreo de los más adinerados del planeta.
© ShutterstockMás mercadillos con enfoque navideño, también repletos de dulces tradicionales y de tentadoras propuestas, se hallan en el propio Parque de la Alameda marbellí o en la Avenida del Mar. Un plan atractivo y de lo más especial con el que disfrutar de la Navidad en todo su esplendor.
© ShutterstockInvierno —¡y Navidad!— con 5 estrellas
Es por todos sabido que lujo, y Marbella, van de la mano. De ahí la inmensa oferta que los hoteles de alta gama proponen, repartidos por toda la ciudad. Alojamientos con nombre propio donde el invierno se disfruta de la misma manera que el verano porque, en este pedacito de sur, donde el sol brilla bien fuerte 300 días al año, siempre se venera el paraíso. Dentro de las propuestas de cada uno de ellos, la Navidad también tiene protagonismo. ¿Por cuál de todas decantarse?
© Marbella Club
© Marbella ClubEn Marbella Club no solo apuestan por una variedad gastronómica de lo más tentadora con la que disfrutar de los días más destacados del calendario, sino que han elaborado un calendario de lo más completo con talleres que abarcan desde una masterclass de coctelería navideña de la mano de Nelson Gallo, jefe de bares del hotel, a cursos de coronas florales, de adornos cerámicos para el árbol, o de personalización de calcetines navideños.
También han preparado planes de lo más apetecibles tanto en Puente Romano, como en Kimpton Los Monteros Marbella o El Fuerte Marbella, enfocados, sobre todo, a la gastronomía, con cenas de gala, veladas especiales y espectaculares brunchs. En este último, el chef Paco Pérez, que capitanea la oferta culinaria del hotel, ha moldeado todo un menú para quienes quieran despedir el año en sus dominios en pleno centro marbellí.
© lobitodemardg¿Qué te quedas con ganas de más? No hay problema, que ya viene Dani García para ampliar, aún más si cabe, el número de opciones para comer muy, pero que muy bien estas Navidades. Echar un vistazo a cualquiera de los menús de los restaurantes de su grupo —BiBo, Tragabuches, Leña o Lobito de Mar— asegura el ser una persona inmensamente feliz sentado a la mesa.
¿Una de golf?
A la glamurosa Marbella no le falta un perejil. Mucho menos, campos de golf. Hasta 20 propuestas diferentes se despliegan por su territorio y alrededores para goce y disfrute de locales y foráneos. Con el clima cálido que acompaña en los días invernales por estos lares, no es de extrañar que miles de europeos aprovechen estos meses para alejarse de sus fríos países de origen y visiten la Costa del Sol para practicar su afición favorita.
© Marbella Golf Country Club¿Y qué se puede hacer en Navidad si se es un apasionado del golf? Para empezar, aprovechar algunos de los torneos que diferentes clubs organizan aprovechando la festividad. Los Naranjos Golf es uno de ellos, así como la que anfitriona el Grupo Trocadero en el Marbella Golf Country Club. En paralelo, también se desarrolla el Winter Tour Marbella en diferentes campos de la zona, un evento en el que participan hasta 70 jugadores de diferentes partes del mundo.
Mano a mano con la naturaleza
Pero aguardan más propuestas en la ciudad malagueña más allá de lo vinculado a la Navidad. Porque si de algo puede presumir Marbella, es de su ubicación sin igual: situada entre el Mediterráneo y el macizo montañoso de Sierra Blanca, el salto de la playa a la montaña se realiza en un plis plas. Así que nada como calzarse las botas de trekking, más que necesarias para subir a su pico más afamado: a 1215 metros sobre el nivel del mar se halla la cima de La Concha, a la que se llega tras una ruta senderista de unas tres horas —ida, y otras tres, de vuelta— de lo más popular entre los marbellíes. De dificultad moderada-alta, se trata de un plan de lo más atractivo para los días soleados de invierno.
© ShutterstockUna jornada que transcurre a lo largo de 12 kilómetros repletos de paisajes únicos que atraviesan pistas forestales, bosques de pinos y alcornoques y tramos rocosos, y que motivan a seguir ascendiendo para obtener la mayor recompensa: las vistas desde la cumbre, desde donde se puede admirar la ciudad de Marbella, el litoral de la Costa del Sol, e incluso el perfil de África en el horizonte.
© ShutterstockSi se es más de tierra firme, eso sí, Marbella también cuenta con opciones. Porque sus 25 kilómetros de costa forman parte de la Senda Litoral malagueña, que permite recorrer sus senderos junto al mar ya sea a pie o en bicicleta, pasando por algunos puntos clave como puede ser la propia Avenida del Mar marbellí, pero también Puerto Banús, la afamada Milla de Oro o la zona de Las Chapas. Una experiencia que otorga la oportunidad de desconectar y vivir ese otro lado de Marbella que, a menudo, se olvida, pero que sigue siendo tan atractivo o más que el que regalan los días de verano. ¿Quién se apunta?
