Si buscas un despertador inteligente que te ayude a empezar el día con buen pie, te ponga la música que te apetece y, de paso, te permita controlar las luces o la calefacción con solo hablar, este es tu compañero ideal.
El Echo Spot es un gadget con un diseño que no desentona y además, lo puedes encontrar en varios colores que se adaptan a tu estilo.
Yo lo tengo en blanco y parece una pieza de diseño más en mi dormitorio. Lo que lo hace especial es que, a pesar de su tamaño compacto, tiene una pantalla táctil de 2,83 pulgadas justo en la parte frontal, lo que lo convierte en mucho más que un altavoz inteligente.
Para mí, su gran ventaja es cómo transforma la experiencia de despertar. Olvídate de esos despertadores ruidosos y feos. Con el Echo Spot, Alexa se convierte en tu asistente personal para las mañanas.
Puedes crear una rutina para que, al sonar la alarma, la luz de tu mesita se encienda gradualmente, empiece a sonar tu playlist favorita y te dé un resumen del tiempo y las noticias mientras te estiras.
Además de ser un despertador de lujo, es el centro de control perfecto para tu domótica en el dormitorio. ¿Tienes frío y no quieres levantarte? Pídele a Alexa que suba la temperatura del termostato. ¿Necesitas una luz más tenue para leer? Simplemente, dile que baje la intensidad de la luz.
En cuanto a la música, no esperes el sonido de un equipo de alta fidelidad, pero para una habitación, su altavoz es más que suficiente. El audio es claro y nítido, perfecto para escuchar la radio por las mañanas, un podcast mientras te vistes o poner música relajante para conciliar el sueño.
Y lo mejor es que puedes ver en su pantalla qué canción está sonando o quién te está llamando, sin tener que encender el móvil.
Una de las cosas que me más me gustan es lo discreto que es por la noche. Tiene un modo nocturno que atenúa muchísimo el brillo de la pantalla, así que no te molesta para nada mientras duermes.
Puedes configurar las esferas de reloj con diseños muy variados, desde los más clásicos hasta los más modernos.