Hay cosas que usamos a diario y en las que no reparamos a la hora de realizar una limpieza exhaustiva porque, a priori, parece que están limpias. Un ejemplo es el teclado del ordenador, algo que aunque no lo creas, es caldo de cultivo ideal para gérmenes y bacterias. Esto se puede evitar fácilmente si se limpia y desinfecta el teclado de manera regular. Pero no basta con pasar un paño, hay que desinfectarlo bien y sacar la suciedad que se acumula.
Esto es mucho más fácil y económico de lo que parece. Te cuento cómo a continuación.
Cinco pasos para desinfectar tu teclado
Aire comprimido
Antes de nada, apaga tu ordenador si es un portátil, y si es un teclado externo, desconéctalo.
Utiliza una pistola de aire comprimido para eliminar migas y polvo entre las teclas.
Asegúrate de apuntar el chorro de aire entre las teclas para llegar a las zonas difíciles de alcanzar.
Pues comprarlo en spray, pero yo te recomiendo que inviertas un poco más en una pistola como esta, ya que es una inversión a largo plazo que usarás para más cosas.
Un paño o gamuza de microfibra
Después de haber sacado toda la porquería con el aire comprimido, pasa un paño de microfibra ligeramente humedecido (con agua o un limpiador suave) por la superficie para quitar los restos de suciedad que hayan saltado.
Este tipo de paño es ideal porque no deja pelusas y es suave, evitando daños o arañazos en el teclado.
Alcohol isopropílico (70%)
Para eliminar bacterias y gérmenes, lo mejor es el alcohol isopropílico (70%) pues se evapora rápidamente, lo que reduce el riesgo de dañar el dispositivo.
Cuando pases el paño, asegúrate de que no esté muy mojado para no dañar el teclado. No rocíes directamente el producto sobre el teclado, siempre hazlo sobre el paño.
Bastoncillos de espuma
A diferencia de los bastoncillos de algodón, estos de espuma no dejan pelusas ni residuos.
Son ideales para llegar a espacios donde no podemos llegar con la gamuza.
Úsalos ligeramente humedecidos con alcohol isopropílico para limpiar las áreas más estrechas o difíciles de alcanzar, como los bordes entre las teclas o alrededor de las esquinas del teclado.
Toallitas desinfectantes
Este paso es más una recomendación para el día a día. Y es que, lo ideal, es que pases una de estas toallitas cada vez que vaya a usar tu teclado.
Ten en cuenta que esto no te exime de limpiar el teclado a fondo cada cierto tiempo, pero es una buena forma de mantener la higiene diaria.