Edda, junto a sus tres hijos, a quienes dedicaría el libro Cuando el abuelo fusiló a papá, sobre la orden de ejecución de su propio padre contra su marido
Edda Mussolini, en 1980, de nuevo en Italia, donde regresó tras la muerte de su padre y de donde tuvo que huir con sus hijos tras renegar de él después de la ejecución de su marido