La pregunta era obligada. Ante la imputación formal a Marius Borg al que se le acusa de 32 delitos, incluidas 4 violaciones, los periodistas que asistían a la rueda de prensa en la que la Fiscalía desgranaba los cargos contra el hijo mayor de Mette-Marit que le podrían suponer hasta 10 años de cárcel, querían saber hasta que punto la investigación salpica a la casa real. Es obvio que la crisis le golpea de lleno, pero, ¿hasta qué punto le afecta la investigación?
© Getty ImagesNingún miembro de la Familia Real ha sido interrogado, pero Sturla Henriksbø, fiscal general del Estado de Noruega, ha confirmado que los mensajes o correspondencia que hayan mantenido los príncipes Haakon y Mette-Marit con víctimas o testigos del caso se ha incluido en la investigación. "En la medida en que existan mensajes entre particulares y familiares del acusado relacionados con el caso, se habrán incluido en el material de investigación, sí", ha asegurado, confirmando también que ya tiene esos mensajes en su haber.
© Getty ImagesEl Príncipe Heredero ha sido el primero en pronunciarse tras la acusación formal a Maris y ha calificado la situación de "desafiante y difícil para todos". "Ya se ha aclarado cuál será la acusación. Ahora le corresponde al tribunal decidir. Por nuestra parte, seguiremos cumpliendo con nuestras tareas", ha dicho este martes durante la inauguración de la feria de piscicultura Aqua Nor, situada en la ciudad de Trondheim. Lo ha hecho después del escueto comunicado que la Casa Real emitió unas horas después de conocerse el escrito de acusación, el que apuntaba que "corresponde a los tribunales conocer este caso y tomar una decisión. No tenemos nada más que añadir".
© Getty ImagesEntre los delitos que le imputan se encuentran cuatro violaciones a cuatro mujeres diferentes, abusos en relaciones de pareja, actos de violencia, alteración del orden público, daños y violación de una orden de alejamiento contra una exnovia, grabaciones ilegales e íntimas a mujeres, amenazas de muerte, acoso policial e infracciones de tráfico. Además, la última violación data de noviembre de 2014, es decir, tres meses después de haber sido detenido por primera vez.
"Este caso es muy grave. La violación y la violencia en las relaciones cercanas son actos muy graves que pueden dejar huellas duraderas y destruir vidas, ha explicado Henriksbø.
Este escándalo ha marcado el último año de una monarquía que no andaba parca en crisis, pero esta, además, supone un enorme varapalo personal, en especial para la madre de Marius, Mette-Marit de Noruega. La futura Reina ha cumplido este martes 52 años y ha sido probablemente uno de los cumpleaños más amargos que recuerda. A la comprometida situación de su hijo, se une el avance de su enfermedad, la fibrosis pulmonar quística, que afecta a su capacidad para desempeñar sus funciones diarias. Mientras familia e institución capean el temporal, el juicio, previsiblemente muy mediático, se espera para 2026.
