Es uno de los grandes proyectos de Marta Luisa de Noruega: la marca de ropa Hest que fundó con dos amigas, Anne-Kari Bøhaugen y Monica Sundt Utne, hace cinco años y que ahora está de aniversario. Para celebrarlo la Princesa y sus socias organizaron un espectacular desfile en la iglesia Kulturkirken Jacob de Oslo en el que han destacado dos modelos en particular, sus hijas mayores, Leah Isadora y Maud Angelica.
La gran sorpresa ha sido, sobre todo, Maud Angelica, ya que su hermana es influencer y modelo y, a sus 20 años, no es la primera vez que se sube a una pasarela. Aún así, esta vez era especial, porque ha sido en honor a su madre. Con absoluta soltura, Leah Isadora ha desfilado con seguridad y mucha naturalidad, luciendo varios diseños de Hest. Maud Angelica, por su parte, ha hecho una aplaudida aparición con un gran bolso que ha llevado con mucho estilo a pesar de no ser modelo profesional. La mayor de las tres hijas de la princesa Marta Luisa y Ari Behn se dedica al arte, como su padre, y también dedica grandes esfuerzos a concienciar sobre la importancia de las medidas de prevención del suicidio, causa del fallecimiento de su padre en la Navidad de 2019.
Marta Luisa de Noruega estaba exultante en su gran día. De negro, como sus amigas y socias, no podía ocultar su orgullo al ver a sus hijas lucir sus creaciones. Después del espectacular desfile, el aniversario de Hest culminó con una fiesta en la que también se ha visto, como no podía ser de otra manera, a su marido Durek Verret, acompañado de su sobrino, Lucas Byrne. El chamán ha acudido con unos pantalones de la firma de su mujer y una original túnica color beige.
No es la única celebración estos días para la hija de los reyes Harald y Sonia, que está a punto de cumplir su primer aniversario de boda con Durek Verret con el que inició una nueva vida que le llevó a dejar sus funciones reales para emprender sus propios proyectos, juntos y por separado. Además, acaba de poner otra piedra hacia este nuevo futuro que aspira a construir ya que por fin ha vendido la casa familiar que compró con su fallecido marido Ari Behn cuando se casó. Después de varios meses a la venta y una bajada de precio, Lommedalen ya tiene nuevos dueños.