Aprovechando sus vacaciones antes de irse a Australia a comenzar sus estudios universitarios, la princesa Ingrid de Noruega, de 21 años, ha concedido una importante entrevista a Forsvarets Forum, el periódico de las Fuerzas Armadas del país, en el que ha dado detalles, desde su oficina en el Palacio Real, sobre los 15 meses que pasó en el Ejército y también ha dado su opinión sobre la igualdad de género.
En el campamento militar de Skjöld, la futura heredera al trono vivía como una soldado más y vivía en un dormitorio para seis personas. Su día a día arrancaba siempre de la misma manera: se despertaba, se aseaba, pasaba la inspección, desayuno y otra nueva inspección. Los lunes tenía carreras y los viernes, entrenamiento de fuerza, también clases de tiro y cursos de explosivos. La nieta de los reyes Harald y Sonia ha recordado que fueron al campo de Mauken, donde tuvieron lugar varias maniobras.
El comandante del Batallón de Ingenieros, Hagen Vangsnes, ha dicho que Ingrid se integró como una más y como tal también le tocó limpiar los baños, los pasillos y la habitación. Una disciplina que combinó con su puesto de artillera en el vehículo blindado de asalto CV90. “Como artillera eres la responsable de los sistemas de armas y comunicaciones del vehículo. También implica brindar apoyo de liderazgo al comandante del vehículo para garantizar un buen conocimiento de la situación (...) Parte del trabajo consiste en tener una visión general del campo de batalla y estar atento, por ejemplo, de dónde el enemigo puede haber colocado minas”, asegura la Princesa.
Además de destreza con la munición, Ingrid de Noruega también ha aprendido mucho de su forma física y mental. “Aprendes mucho y eso te lo llevas contigo. Técnicas mentales. Aprendes que puedes hacer más de lo que crees. Puede que pienses que se va a detener, pero luego logras llegar mucho más lejos. Fue una experiencia genial”, dice la futura Reina.
'Una experiencia de lo más enriquecedora'
La Princesa también ha revelado que lo más difícil de su etapa militar fue “cuando surgen situaciones en el pelotón, pero también fue lo mejor, porque aprendes que todo saldrá bien si te atreves a aceptar las cosas” y destaca que esta experiencia la ha enseñado muchas cosas.
Ingrid también ha contado que “la igualdad de género ha sido importante para mí desde pequeña. Me afecta directamente, porque soy la primera heredera al trono de la era moderna. Por eso es un tema importante”. Margarita de Dinamarca y Noruega, quien murió en 1412, ha sido la única monarca mujer que ha tenido el país y en un futuro, Ingrid será la segunda Reina por derecho propio.
Sobre si ha extrañado estar lejos de casa, Ingrid cuenta que celebró sus cumpleaños número 20 y 21 años en el campamento y que echó de menos a su familia, pero estar lejos de casa ha sido “genial al igual que tener mis propias rutinas y mi propia vida diaria”. A pesar de la dureza del campamento en el que estuvo, situado al norte del país, la primogénita de Haakon de Noruega dice que “hay algo especial en vivir en el norte, donde hace tanto frío. Es importante tener las rutinas que uno crea, trabajar bajo la lluvia, que no se pueden experimentar en otros lugares”. También recuerda con humor las novatadas que sufrió: “Nos hicieron bromas y pusieron alambre de púas en el pasillo y jabón delante de las puertas”.