Los miembros más pequeños de la creciente [Familia Real noruega] han hecho las delicias de los admiradores monárquicos en sus apariciones de los últimos días, especialmente la última incorporación, Sverre Magnus, que asistió la pasada Nochebuena a su primer oficio religioso navideño.
La familia de Haakon está instaurando sus propias tradiciones para estas entrañables fiestas. En lugar de ir a la iglesia el día de Navidad, como era contumbre hasta hace dos años para el Heredero, lo hacen la víspera con la familia de la [princesa Mette-Marit]. Acudieron al servicio religioso el día 24 de diciembre por la tarde en la iglesia de Asker. La princesa Ingrid Alexandra, en brazos de padre y el pequeño Sverre, en los de su madre.
Esta nueva tradición de los Príncipes se remonta a 2003. Asker está a apenas un kilómetro de la vivienda en Skaugum de los Herederos, y en su iglesia contrajeron matrimonio las princesas Astrid y Ragnhild y se confirmó la princesa Marta Luisa. Excepcionalmente, la [Familia Real noruega] al completo pasó el año pasado las fiestas en Skaugum, con lo que oyeron todos misa en Asker, pero tradicionalmente los Reyes festejan la Navidad en Kongsseteren y el servicio religioso se celebra el día 25 en la capilla de Holmenkollen, como ha sucedido en las presentes navidades.
"¡Un guau-guau!" Los soberanos noruegos y la princesa Marta Luisa y su esposo, Ari Behn, con sus hijas se reunieron en Kongsetteren. El día de Navidad asistieron todos juntos a la capilla de Holmenkollen, pero, sin lugar a dudas, la protagonista absoluta del día volvió a ser uno de los más pequeños. En esta ocasión, la primogénita de la princesa Marta Luisa, Maud Angelica, que se empeñó en jugar con un perrito que pasaba. "¡Mira!, un guau-guau", gritó la niña intentando bajar al suelo. Su hermana pequeña, Leah Isadora, se había quedado en casa con la niñera.
Al comienzo de la ceremonia, el pastor Jon Petter Heesch dio la bienvenida al Rey, que hacía 3 años que no celebraba allí la Navidad -se ausentó en 2003 por motivos de salud y en 2004 porque la Familia Real se reunió en Skaugum-. Durante el sermón, el oficiante se refirió al centenario que conmemoraba este año la Monarquía. Tras el servicio religioso, reinaba el buen tiempo en Kongsseteren, por lo que es posible que la Reina y algún que otro miembro de la familia aprovecharan para esquiar un ratito después de comer.
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