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Alberto II de Mónaco está enmarcando su 20º aniversario como soberano con un regreso simbólico a los orígenes históricos de la familia Grimaldi. Si el pasado mes de abril los príncipes y sus hijos emprendieron una visita oficial de dos días a la región de Côtes-d'Armor, en Bretaña, para conmemorar el tricentenario de la muerte de su antepasado Jacques III de Matignon. Ahora ha llegado el turno de la princesa Gabriella, protagonista del próximo viaje familiar que la llevará al antiguo condado de Carladès, título que ostenta la princesa de diez años desde el momento de su nacimiento, como segunda en la línea sucesoria al trono del pequeño país de la Costa Azul.
© GTRESSerá el próximo 9 de julio la primera familia monesgasca será recibida en primer lugar en Vic-sur-Cère, una población y comuna francesa, situada en la región de Auvernia y corazón del antiguo condado de Carladès, una localidad que debe su esplendor a Luis XIII, quien la erigió como sede señorial para el príncipe Honoré II. En este enclave cargado de historia se encuentra una residencia privada perteneciente a los príncipes de Mónaco, donde en septiembre de 1668 se alojaron el príncipe Louis I de Mónaco y Catalina Carlota de Gramont, antepasados directos de Alberto de Mónaco.
© Getty ImagesDurante esta visita, la princesa Gabriella protagonizará un momento especial al inaugurar una plaza que llevará su nombre, concebida como parte del proyecto de rehabilitación del centro urbano. En calidad de condesa de Carladès, recibirá simbólicamente la llave de la ciudad de manos de la alcaldesa Annie Delrieu-Tourtoulou, quien también ocupa la vicepresidencia de la asociación francesa de Sitios Históricos Grimaldi. No hay que olvidar que el príncipe Alberto lleva años trabajando en la documentación y estudio de su propia genealogía.
© Getty ImagesEl viaje se cerrará con una foto familiar en un banco bajo un árbol, cerca del cual la joven princesa Carlota, bisabuela de la pequeña Condesa de Carladès, fue fotografiada durante una excursión de verano en 1912. Esa princesa Carlota, madre del príncipe Raniero fue clave para la continuidad de la dinastía, ya que nació fuera del matrimonio de Luis II de Mónaco, pero finalmente fue adoptada por este para que pudiera ostentar los derechos dinásticos y evitar que Francia asumiera el control de Mónaco, tal y como estaba estipulado en caso de descendencia legítima por parte de los Grimaldi.
© Getty ImagesEste será un paso más para la princesa Gabriella, que, igual que su hermano, el príncipe heredero Jacques, está asumiendo cada día más presencia en la vida institucional, llegando a estar presente en el último recibimiento de Estado que el príncipe Alberto de Mónaco brindó al Presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, y la primera dama, Brigitte. Justo esta misma semana el príncipe Alberto ha concedido una entrevista a una cadena francesa en la que ha hablado de cómo se educa a un niño para la vida institucional: "No debe afectarles emocionalmente ni ocuparles demasiado. Debemos darles espacio y libertad. Es muy importante poder vivir la juventud". "Esto no se puede hacer de manera formal con un 'siéntate aquí' o un 'esto es lo que hay que hacer'. Pienso que hay que proceder con pequeñas pinceladas", afirmó el jefe del Estado.
