La boda: “oui Monseigneur”

El lunes 18 de abril de 1956, se celebró la ceremonia civil en el salón del trono del palacio Grimaldi

Por hola.com

Tanto los festejos como la ceremonia en sí habían sido cuidadosamente planeados por los ayudantes de Raniero, pero los acontecimientos les desbordaron. ¿quién iba a pensar que se presentarían más de 1.600 periodistas? Nadie lo esperaba y en la oficina de prensa, sólo hablaban francés. De hecho, fue tal el furor colectivo que, hasta un año después de la boda, no consiguieron calmarse ni disfrutar tranquilamente de la película que la Metro había hecho sobre el evento.

"Mi hermana caminaba en una nube"
Pero no se crean que todo fueron malos ratos, por supuesto que no, hubo hermosas fiestas mucha alegría e innumerables regalos. Pequeños presentes hechos por la gente que únicamente les conocía por las revistas. Y también, otras muestras de cariño más costosas como el Rolls Royce que el principado ofreció a Gracia o los dos proyectores de cine y la gran pantalla que sus amigos de Filadelfia le regalaron para que no se olvidase de sus películas. Raniero para no ser menos, se presentaba cada día con una costosa joya. Mi hermana caminaba en una nube.

Princesa Grace por la gracia de Dios
El lunes 18 de abril de 1956, se celebró la ceremonia civil en el salón del trono del palacio Grimaldi. En apenas unos minutos, Gracia se convirtió en Princesa de Mónaco y Alteza Serenísima. Un día después, el 19 de abril, Gracia entraba en la catedral de San Nicolás del brazo de su padre. La "princesa Gracia" estaba a punto de hacer su aparición. A su lado, Raniero: "Oui monseigneur", dijeron ambos al obispo de Mónaco.