Ir al contenido principalIr al pie de página
Es Tendencia

Una vida bajo el punto de mira

Sarah Ferguson cumple 66 años en pleno vendaval


Desde que se casó en 1986 con el príncipe Andrés parece atrapada dentro de una tormenta de la que no es capaz de escapar


La princesa Eugenia de York y Sarah Ferguson en Ascot© WireImage
Sira AcostaRedactora senior de Realeza y Guionista
15 de octubre de 2025 - 6:16 CEST

Sarah Ferguson cumple este 15 de octubre 66 años y no atraviesa precisamente un gran momento. Desde que se casó en 1986 con el príncipe Andrés, el hijo favorito de Isabel II, parece atrapada dentro de una tormenta de la que no es capaz de escapar. Divorcio, escándalos mediáticos, polémicas de dinero, enfermedad, redención pública y, de nuevo, bajo el punto de mira. Justo en el preciso momento que parecía haber encontrado un lugar cómodo en los márgenes de la realeza británica, la filtración del correo que le envió a Jeffrey Epstein disculpándose por renegar de él, hace que todo salte por los aires y, Sarah Ferguson, todavía duquesa de York, todavía viviendo en terrenos reales, vuelve de nuevo al punto de partida. 

Sarah Ferguson en Ascot© Getty Images

Lo que no se puede negar a la exmujer —y mejor amiga— del príncipe Andrés es que es resistente. Quizá la más resistente de todas aquellas mujeres que entraron en la casa real británica por matrimonio, y con ello, asumieron la condena de un escrutinio público de por vida. 

Durante años la princesa de Gales y la duquesa de York fueron inseparables, tras la muerte de Diana circularon varias teorías sobre su amistad© Getty Images
Diana de Gales y Sarah Ferguson en un partido de polo en 1983
Isabel II con su hermana, la princesa Margarita, y su nuera, la duquesa de York, en las carreras de Ascot de 1991, en cuestión de meses Sarah Ferguson tendría que dejar la Casa Real británica© Getty Images
Isabel II con su hermana, la princesa Margarita, y su nuera, la duquesa de York, en las carreras de Ascot de 1991, en cuestión de meses Sarah Ferguson tendría que dejar la Casa Real británica

Algunas, como Diana de Gales, se quejaron ante la BBC. Otras, como Meghan Markle, se marcharon y luego se quejaron ante los medios estadounidenses. Pero Sarah Ferguson está hecha de otra pasta. Ella no se quebró. Se dobló, sí, muchas veces. Cayó en desgracia, fue ridiculizada, apartada, ignorada. Pero siempre encuentra la redención, en parte, porque jamás se ha enfrentado a la realeza británica, ni a la familia, ni a la institución. Ella pronto comprendió que la lealtad era su tabla de salvación y ser la madre de dos princesas de cuna, un salvoconducto y, probablemente, esto vuelva a ser así en cuanto pase la última de sus tormentas. 

Media Image© Getty Images

Sarah, que como escritora, empresaria y filántropa, ha sido en los últimos tiempos muy activa en redes sociales, no publica nada desde el pasado 11 de septiembre, cuando escribió unas frases de recuerdo sobre las Torres Gemelas. Su silencio llegó después de que la prensa británica difundiera un correo que ella misma envió a Jeffrey Esptein en el año 2011, justo cuando salió a la luz la vinculación entre el príncipe Andrés y el magnate que se quitó la vida en prisión a la espera de ser juzgado por tráfico sexual de menores. 

En ese correo, que representa el último de sus escándalos, ella se disculpa con su "amigo fiel, generoso y supremo" y se lamenta por haberlo tenido que repudiar públicamente, alegando que sus contratos para la escritura de libros infantiles estaba en peligro. De este modo, se prueba que ella mintió, no solo con su discurso público de condena, sino también al haber asegurado que había cortado los lazos con él a raíz de su primera condena. 

Media Image© Getty Images

Hay que recordar que esta filtración se produjo justo una semana después de acudir como un miembro más de la realeza británica al funeral de la duquesa de Kent, donde compartió espacio con el rey Carlos III, los príncipes de Gales y la duquesa de Edimburgo, entre otros. El caso es que después de esto, seis fundaciones cortaron sus lazos con ella y hasta el Ayuntamiento de York se planteaba tomar alguna medida. En seguida se deslizó que ya no sería invitada a la Navidad real en Sandringham, algo que nunca se confirma oficialmente, pero que todo apunta a que será así. 

Imagen tomada durante el reciente funeral de la duquesa de Kent© Getty Images
Los duques de York asistieron al funeral real de la duquesa de Kent días antes de que se filtraran los correos entre Sarah Ferguson y Jeffrey Epstein© Getty Images

Y cuando todavía la duquesa de York se estaba recuperando, y aclarando por boca de su abogado que ese correo lo escribió por temor al ahora fallecido Epstein, viene la siguiente filtración y es todavía más turbia que la anterior.  En correos electrónicos obtenidos por The Sun y Daily Mail, el príncipe Andrés le dice a Epstein: "¡Estoy igual de preocupado por ti! ¡No te preocupes por mí! Parece que estamos juntos en esto y tendremos que superarlo. Si no, mantente en contacto y pronto volveremos a jugar". Si bien este correo no afecta directamente a Sarah, sí que arroja nuevas sombras sobre Andrés, al que ella siempre ha defendido a ultranza. 

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.