Fueron los duques más influyentes y, ahora, tras una caída en picado de años, están en mínimos históricos, aunque los peores datos siempre se los lleva Meghan. Las críticas la golpean desde todos los frentes y su reputación también ha quedado en entredicho, pero la duquesa sonríe ante los desafíos y continúa con su vida. Al menos es lo que parece. Y, por supuesto, nada iba a estropearle su 44 cumpleaños, del que no habían trascendido detalles al cierre de esta edición, pero del que se dio por hecho que celebraría en California junto a los suyos: el príncipe Harry —los rumores de crisis desaparecieron hace meses—; sus hijos, Archie (seis años) y Lilibet (cuatro); su madre, y sus mejores amigos.
En el último aniversario de su marido (celebró la llegada de los 40 el pasado septiembre), la Familia Real británica felicitó al príncipe, pero no es el caso de Meghan, que lleva ya tiempo sin recibir (al menos de manera oficial) ninguna tarjeta, confirmándose que cada vez está más alejada de los Windsor. Una Familia Real que, en la guerra enquistada, encontró una solución: mantener la calma… Y ahora, después de varias reuniones secretas, la duda es si puede haber un cambio de rumbo con Harry. Según algunos expertos reales, el príncipe está "desesperado" por sanar su relación con Carlos III, al que no ha visto desde febrero de 2024, y sus últimos pasos por un campo minado en Angola —la última vez fue en 2019— hacen pensar en sus ganas de arreglarlo. Al menos esa es la lectura de algunos medios británicos.
Cada vez más alejada de la Familia Real y sin poder vencer a la polémica, celebró su aniversario junto al príncipe Harry y sus hijos, el príncipe Archie y la princesa Lilibet
A la espera de que se resuelvan las incógnitas familiares, podría decirse que Meghan ha tenido un aniversario agridulce. Por un lado, no puede sentirse más querida por los suyos; pero por otro, la celebración ha quedado empañada por la noticia de que en septiembre no van a renovar su contrato con Netflix, al no obtener sus contenidos los resultados esperados. No es oficial, pero todo apunta a que a partir de ahora solo habrá acuerdos puntuales, sin olvidar que Netflix es socio de As Ever, la marca de estilo de vida de Meghan, que sí que es un proyecto prometedor. Sus productos suelen agotarse en pocas horas y sigue ampliando su gama.