La mansión del príncipe Harry y Meghan Markle en Montecito (California) se ha convertido en su bastión y en su lugar en el mundo. Allí están criando a sus dos hijos, Archie, de 6 años, y Lilbet, de 4. En esta exclusiva urbanización donde cuentan entre sus vecinos con estrellas de Hollywood, han conseguido su ansiada paz, tranquilidad y discreción lejos de los focos. Esta propiedad poco tiene que ver con su vivienda del Palacio de Kensington en Londres a la que se fueron de recién casados.
La casa de Montecito de los Sussex parece un palacio romano. A principios de este mes, Kelly McKee Zajfen, amiga íntima de Meghan compartió en redes sociales un adelanto de las celebraciones del 4 de julio en la que Meghan aparece con un top y una falda azul y blanca de Farm Rio, mientras sostiene un cóctel casero. “Por la libertad, por la amistad y por encontrar momentos de alegría donde sea posible. Agradecida por este día, este sol y este cóctel tan fresquito. ¡Gracias, dulce M!. ”, escribió Kelly, mientras se veía una parte del jardín del Príncipe con vegetación y unos arcos, muy al estilo mediterráneo y los palacios romanos.
El jardín de Meghan y la huerta son dos de las características de la casa que más gustan a la Duquesa y cuenta con una gran pradera de césped, un estanque, un gallinero y un área de juegos para los niños. “Una de las primeras cosas que vio mi esposa al pasear por la casa fueron esas dos palmeras, ¿Ves cómo se conectan en la base? Dijo: ‘Amor mío, somos nosotros’. Y ahora, todos los días, cuando Archie pasa junto a nosotros, dice ‘Hola, mamá. Hola, papá’”, manifestó en una entrevista con The Cut en 2022.
La zona exterior de la casa de Harry y Meghan, valorada en 25 millones de euros, refleja la energía de la pareja con amplios jardines y rosales, con una estética tradicional pero relajada. La vivienda, que compraron en 2020, cuenta con nueve dormitorios, 16 cuartos de baño y una casa de invitados separada. También tiene una cancha de tenis, una piscina y una bodega, así como una biblioteca, un gimnasio y una sala de juegos para los niños.