Desde mediados de noviembre, Holanda comienzan a llenarse de luces y adornos, y a principios de diciembre reciben con gran algarabía a San Nicolás, quien anuncia nada más llegar de España, el inicio de unas fiestas que se prolongan hasta el 1 de enero.
Los niños entonan canciones y colocan junto a la chimenea un zapato con una zanahoria o cualquier otro alimento para el caballo de San Nicolás o Sinterklaas que llega al puerto de Amsterdam el último sábado de noviembre con su siervo negro, Peter, en un barco de vapor...
Un palacio sin niños ... En el palacio de La Haya, los hijos de la Reina se hicieron adultos hace ya mucho tiempo. De hecho, han pasado más de quince años desde que éstos dejaron de creer en su Sinterklaas y en su siervo negro... Estas Navidades, sin embargo, para la Familia Real holandesa el espíritu navideño se acompaña ( a pesar del fallecimiento del príncipe Claus, esposo de la Reina) de otras muy emotivas celebraciones: Eloisa, la primera nieta de la Reina, hija del príncipe Constantino y su esposa, Laurentien, acaba de ser bautizada... Y apenas quedan un meses para celebrar el primer aniversario de bodas de Guillermo y Máxima.
Pan de los enamorados para Máxima Máxima Zorreguieta vivirá, por primera vez, como Princesa de Orange las tradiciones y las costumbres navideñas del país sobre el que un día reinará. Comerá las figuritas de azúcar, letras de chocolate, bizcochitos especiados -para los rituales de la fertilidad- pan de jengibre, (pan de los enamorados) y mazapán. Y mientras coma un trozo de éste le contarán que el mazapán data del siglo 17. De la época en la que San Nicolás, además de ser un generoso amigo de los niños, cumplía las funciones de agente matrimonial, y era un gran protector del matrimonio y la familia.
Un poema dedicado Posiblemente, Máxima reciba también por primera vez un regalo sorpresa y anónimo -generalmente, algo valioso y pequeño escondido dentro de una fruta o hortaliza- y un poema con el que San Nicolás expresará su opinión sobre ella. La tradición manda que todos los regalos estén empaquetados de manera imaginativa y que vayan acompañados de un poema dedicado.
Y ella conservará para siempre en su memoria que, el 5 de diciembre de hace ya dos años, su futuro marido le declaró su amor ofreciéndole un trocito de mazapán... Y la imagen de San Nicolás vestido de obispo sobre un caballo blanco, pasando frente al Palacio...
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