La Casa Real española ha alcanzado un millón de seguidores en Instagram. Ha sido la última monarquía en abrirse una cuenta oficial en esta red social, pero en poco más de un año ha conseguido tener un gran impacto con muchas publicaciones que se han hecho virales, a pesar de ser la última monarquía europea en estrenarse en la red social más visual.
Tras diez años de reinado de Felipe VI, el 20 de junio de 2024, la Jefatura del Estado abrió cuenta en Instagram marcando una era nueva. En tan solo mes y medio alcanzó los 530.000 followers.
La reina Rania, la que tiene más impacto
Al ser la más reciente, la influencia digital de nuestra Casa Real aún dista de la de Rania de Jordania, la auténtica 'reina' de las redes y de la Familia Real británica. La mujer del rey Abdalá fue pionera en exponer su faceta institucional y familiar al gran público a través de imágenes. Más teniendo en cuenta el fuerte hermetismo que caracteriza a las monarquías árabes. Marcó un antes y un después cuando en 2013 se convirtió en pionera en el mundo royal en las redes sociales. Tiene más de 10 millones de seguidores, más de 1.400 publicaciones y tan solo sigue dos perfiles: el de la Corte Real hachemita y el de su hijo, el príncipe heredero Hussein.
La reina Rania ha conseguido el nivel más alto de interacción por el enfoque personal, empático y social de su cuenta con mensajes sobre empoderamiento femenino y humanitario. Desde que se convirtió en abuela por primera vez, en agosto de 2024, nos ha mostrado imágenes de la intimidad de su familia y de su hogar, de cómo trabaja y ha enseñado algunas estancias hasta ahora desconocidas de Palacio.
Los reyes Carlos y Camilla, los que más fans tienen
El Instagram de la reina jordana solo es superado por el de la Familia Real británica, que tiene más de 13 millones de followers, aunque con menos engagement. Su contenido es tradicional e histórico y destacan las publicaciones en las que enseñan las grandes ceremonias, cómo se prepara una cena de Estado, o las generaciones más jóvenes. Además, la influencia de Reino Unido en todo el mundo, por sus lazos históricos con muchas naciones, hacen que sea uno de los espejos en los que se miran otros perfiles institucionales. Sus contenidos están cuidadosamente producidos y saben combinar como pocos la mayor de las solemnidades con pequeñas dosis de cotidianidad, lo que rápidamente hace que se viralice.
Los reyes Federico y Mary de Dinamarca superan el millón de fans en Instagram. Su estilo es cálido y moderno con nivel alto de impacto en Instagram gracias a fotos naturales de los Reyes y a la pompa de las grandes celebraciones de la Corte danesa. Su reel más visto en lo que va de año es el de la princesa Isabella, con 1,7 millones de visualizaciones. Combina lo institucional con un marcado sentido estético, elegancia, innovación sin perder la esencia de la realeza. Su apuesta por acercarse mediante a la tecnología a la gente joven se vio clara cuando la princesa Isabella fue retratada por su cumpleaños con un iPhone.
Los reyes Guillermo y Máxima de Holanda tienen un millón de seguidores con un contenido equilibrado entre lo familiar y lo institucional. Sus posts más virales han sido los cumpleaños, los viajes o las fotos espontáneas. Tienen una media de 200.000 visualizaciones por reel, aunque los vídeos de la princesa Amalia superan el millón y tuvo especial impacto su graduación. El segundo más visto este año fue su visita al Ayuntamiento de Ámsterdam, con 1,6 millones de visitas. Su comunicación es informal, pero calculada, donde muestran momentos inéditos, sin excesos de protocolo, priorizando la rapidez, la información y la estética que pide el público digital.
El perfil de la Casa Real sueca no supera los 800.000 usuarios e impactan aquellos momentos que muestran a los miembros de la Familia Real en su entorno más informal. El álbum privado de la princesa Victoria alcanzó los 5,1 millones de visitas. Su presentación es austera y cercana. No temen mostrar su día a día, escenas familiares o escapadas campestres con un estilo sencillo, efectivo y humano.
La Casa Real noruega representa la sobriedad comunicativa con alrededor de 400.000 fans con un impacto de unas 250.000 impresiones por vídeo. Los contenidos dedicados a la princesa Ingrid superan las 700.000 y su post más visto tuvo 1,2 millones de visualizaciones: la cena de Estado en honor al presidente de Francia. Su comunicación es medida y profesional.
Las más discretas de Europa
La Casa Real belga, el Palacio de Mónaco y la Cote de Luxemburgo tienen, entre 100.000 y algo más de 200.000 seguidores. Las tres son muy activas, aunque con contenido clásico y centrada en actos oficiales, con un toque más formal y clásico. El engagement que provocan es más bajo, lo que reduce su alcance. Sin embargo, esto podría estar a punto de cambiar, en Luxemburgo, por el relevo al frente del Gran Palacio Ducal, con una nueva generación al frente; y en Bélgica, por el giro en la comunicación inspirado en sus vecinos holandeses e impulsado por los hijos de Felipe y Matilde de Bélgica.




















