Es una imagen histórica que cuando se captó mostraba el pasado y el futuro de la monarquía española. En la instantánea, un bebé de apenas un mes con un faldón, a punto de recibir el bautismo, en brazos de su bisabuela que ejercía de madrina. Pero fue mucho más, era una reina de España, Victoria Eugenia de Battenberg, quien tras 37 años en el exilio pisaba la patria por primera vez y lo hacía sosteniendo al futuro monarca, Felipe VI.
El bautizo de don Felipe, celebrado el 8 de febrero de 1968 en Madrid, fue un evento de gran importancia para la Familia Real española. La presencia de la reina Victoria Eugenia en la ceremonia fue un símbolo de continuidad dinástica y de fortalecimiento de los lazos familiares. El futuro Felipe VI era el primer miembro de los Borbones nacido en democracia y la mujer de Alfonso XIII suponía un rol como figura de autoridad y respeto, que representaba la historia monárquica española con el nacimiento del futuro Rey.
Este martes, en la Galería de las Colecciones Reales, los reyes Felipe y Letizia tuvieron oportunidad de encontrarse con este pedacito de la historia en una imagen no vista de su recorrido realizada por Patrimonio Nacional. En ella se ve al jefe del Estado, contemplando como su bisabuela le cogía en brazos, en una instantánea de gran tamaño que forma parte de la exposición sobre la vida de la Reina Victoria Eugenia que hace un recorrido sobre su boda, su papel como reina consorte rompedora y su labor humanitaria que rompió moldes.
La muestra reúne alrededor de 350 piezas, entre obras artísticas, documentos, libros y material fotográfico, que ponen de relieve la personalidad y la influencia de esta Reina. Una exhibición que permite al público redescubrir la figura de una mujer que supo combinar tradición y modernidad, dejando una profunda huella en la historia de la monarquía española. Esta exposición estará disponible hasta el 5 de abril de 2026.









