El rey Juan Carlos está en una emocionante etapa. Se acaban de publicar sus memorias, Reconciliación, en Francia, y antes de que se acabe el año ya podremos leerlas en España. Coescritas con la autora e historiadora Laurence Debray, quien le ha acompañado en todo el proceso de escribir este libro, en el que don Juan Carlos cuenta su historia.
A finales del mes de octubre, Don Juan Carlos hacía un viaje exprés a Vitoria antes de partir a Lisboa y, desde allí, regresar a nuestro país para participar próximamente, el 8 y 9 de noviembre, en las regatas de Sanxenxo. Entre medias de su apretado calendario recibió en exclusiva el primer ejemplar de sus memorias en francés, emocionándose al ver la obra que narra su extraordinario destino.
A lo largo de sus 512 páginas conoceremos, como nunca antes habíamos tenido la oportunidad, al monarca, y lo haremos recorriendo, junto a él, sus recuerdos mejor atesorados, reflexiones sobre su reinado ―este mes de noviembre, se conmemoran 50 años de su ascenso al trono― y su mirada más sincera hacia las complicaciones a las que tuvo que hacer frente sin obviar, por supuesto, los errores que haya podido cometer en sus casi cuatro décadas al frente de la Casa Real española.
"Desde el principio, quedó claro que iba a abordar todos los temas, incluso los más desagradables. No podía omitir nada, era consciente de ello. Es lúcido sobre los errores que cometió. No quería en absoluto intentar eludirlos", nos confiesa la historiadora francovenezolana, en una entrevista en exclusiva.
Asumiendo las responsabilidades a las que puede enfrentarse con la publicación de Reconciliación, el rey Juan Carlos, desde su corazón y con una decisión audaz, ha querido ilustrar la historia reciente de nuestro país desde la perspectiva de una figura tan clave como ha sido la suya ―y que, como en el ajedrez, solo ha querido proteger lo suyo―. "Se dio cuenta de que los jóvenes con los que hablaba, los hijos de sus amigos, no sabían nada de la Transición. Necesitaba contar su versión de la historia y su verdad", nos confiesa Laurence.
"Necesitaba aclarar algunos puntos de su historia. Sabe que es una decisión arriesgada, que va a ser muy criticado", continua la biógrafa, que subraya que Don Juan Carlos "quiere asumir la responsabilidad de este libro, de su publicación". Para la elaboración del gran proyecto de su vida, Laurence y el emérito tenían conversaciones distendidas donde él caminaba por su memoria, a paso ligero, y explicándoselo a ella tal cual lo recordaba. Tal cual lo había vivido. Ella, por su parte, transcribía y organizaba lo narrado antes de compartirlo con el padre del rey Felipe VI. Así, hasta tres ocasiones o más, hasta tener cada capítulo pulido a la perfección.
Así nació Reconciliación, con la misma ilusión con al que don Juan Carlos ha recibido el primero de miles de ejemplares, en esta ocasión, en su lengua materna, el francés, lo que lo hace aún más especial, ya que lo conecta con sus orígenes, aquellos de los que se emociona al nombrarlos en alto.









