Serena Williams ha protagonizado uno de los momentos más esperados y comentados de los Premios Princesa de Asturias 2025: su primer encuentro con los Reyes Felipe VI y Letizia, acompañados por la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, en la tradicional recepción celebrada en el Hotel de la Reconquista de Oviedo. La tenista estadounidense, galardonada con el Premio de los Deportes, sorprendió a todos, con su elegante elección, un conjunto de alta costura firmado por el diseñador libanés, Elie Saab, que causó sensación por su elegancia.
El diseño, en blanco impoluto, estaba compuesto por un vestido largo de silueta fluida con detalles troquelados y un abrigo a juego que aportaba estructura y sofisticación. Serena completó el look con altísimos zapatos de tacón rojo y su larga melena suelta. Radiante y luciendo la mejor de sus sonrisas, la extenista acaparó todas las miradas al desfilar por la alfombra roja del hotel asturiano, donde la esperaba la princesa Leonor y el resto de la Familia Real. Sin duda, su elección del blanco, color asociado a la excelencia y la paz, fue interpretada como un guiño a la solemnidad del acto.
Durante la recepción, Serena se mostró visiblemente emocionada al recibir de manos de la princesa Leonor la insignia, que la reconoce como Premio Princesa de Asturias de los Deportes. La complicidad entre ambas, al recibir este galardón, fue captado por las cámaras y se ha convertido en una de las imágenes más comentadas del evento. Después saludó al Rey y a la Reina Letizia. Esta, gran aficionada al tenis, intercambió algunas palabras con la deportista estadounidense.
A lo largo de su carrera, Serena Williams ha redefinido el tenis femenino con una trayectoria marcada por la excelencia, la perseverancia y la superación. Con 23 títulos de Grand Slam en individuales, cuatro medallas olímpicas y una influencia que trasciende lo deportivo, ha sido reconocida por su papel como referente global en la lucha por la igualdad, la diversidad y el empoderamiento femenino. El jurado destacó su capacidad para inspirar a generaciones enteras, su compromiso con causas sociales y su impacto en la historia del deporte, convirtiéndola en una merecida ganadora del Premio Princesa de Asturias de los Deportes 2025.
La presencia de Serena, magnética y cercana, eclipsó a otros galardonados como Eduardo Mendoza o Graciela Iturbide. La tenista está disfrutando al máximo de este momento, recordando que conocía los Premios desde que Meryl Streep los recibió en 2017, y que desde entonces soñaba con estar allí.
Tras recibir la insignia de manos de la Princesa Leonor, Serena se unió al resto de galardonados para la tradicional foto de grupo. Consciente de su imponente estatura, se colocó en la segunda fila para no tapar a nadie. La imagen, ya viral, muestra a Serena sonriente, rodeada de premiados y miembros de la Familia Real, como símbolo de una jornada inolvidable.
Y si hoy ha sido el día de la elegancia y la emoción, ayer fue el de la espontaneidad y el ritmo. A su llegada a Oviedo, Serena protagonizó un momento viral al salir del hotel con un vestido drapeado color caramelo de Magda Butrym y unos altísimos tacones de Louboutin. En plena explanada, se puso a bailar frente a la Banda de Gaitas, regalando a los presentes una escena inolvidable. Su energía, su poderío físico y su alegría conquistaron a ovetenses y turistas por igual.
Con este primer encuentro real, Serena Williams no solo se llevó un premio, sino también el cariño de todo un país. Su paso por Oviedo ha sido una celebración de la excelencia, la autenticidad y el estilo. Y como buena estrella, se despidió bailando, dejando claro que su legado va mucho más allá de las pistas.










