La Familia Real española ha vuelto a decantarse por Grecia para disfrutar de sus vacaciones privadas. Aunque desde Zarzuela no se ha emitido una confirmación oficial, la ruta del Falcon, el avión oficial de la Casa Real, ha sido clave para desvelar sus movimientos. Desde que el año pasado se hicieran públicas las rutas de esta flota, cuya misión es trasladar a autoridades civiles, militares y a los Reyes, dentro y fuera del territorio nacional, el destino de sus vacaciones ha dejado de ser un misterio.
Gracias a la transparencia de estas operaciones, el año pasado también se supo que los Reyes habían viajado a Grecia, posiblemente invitados por los monarcas holandeses, Guillermo Alejandro y Máxima, quienes poseen una propiedad en tierras helenas. Un gesto que habría servido como agradecimiento por el acompañamiento y la hospitalidad que recibió la princesa Amalia durante su estancia en Madrid, donde cursó parte de sus estudios universitarios. Este verano, curiosamente, los Reyes de Países Bajos han vuelto a elegir Grecia como destino, lo que refuerza la idea de una estrecha relación entre ambas familias reales.
Según ha publicado Mujer Hoy, el Falcon que transportaba al rey Felipe, la reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía aterrizó en el aeropuerto de Atenas el pasado miércoles por la noche, en torno a las 21:30 horas, tras finalizar su tradicional estancia en Palma de Mallorca, donde disfrutaron de unos días de ocio, regatas y la ineludible agenda institucional.
Aunque se desconoce el lugar exacto donde se encuentran alojados los Reyes y sus hijas, según ABC, podrían estar alojados en la mansión de sus homólogos, los reyes Guillermo y Máxima, en el Peloponeso. Al parecer, un auténtico paraíso. Adquirida en 2012 al fotógrafo alemán Manfred Ricker por cerca de cinco millones de euros, la propiedad cuenta con más de cuatro mil metros cuadrados, tres edificios independientes, pista de tenis, piscina, playa privada y un puerto exclusivo. Además, está rodeada de un entorno natural que garantiza privacidad absoluta.
La elección de Grecia no es casual
La Familia Real española mantiene una estrecha vinculación con el país heleno, especialmente a través de la madre del Rey, doña Sofía, nacida en Atenas y hermana del último rey de Grecia, Constantino II. Esta conexión familiar ha perdurado a lo largo de los años, y no se descarta que, durante su estancia, los monarcas aprovechen para reencontrarse con sus primos griegos, descendientes de Constantino, quienes recientemente recuperaron la nacionalidad griega.
Estos días en tierras helenas son una magnífica oportunidad para que los Reyes compartan tiempo con sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, antes de que cada una retome sus compromisos académicos. Leonor se prepara para iniciar su último año de formación militar en la Academia General del Aire y del Espacio, en San Javier (Murcia), donde se incorporará el 1 de septiembre. Por su parte, Sofía comenzará sus estudios universitarios en el Forward College de Lisboa el próximo 8 de septiembre, dando inicio a una formación internacional que se desarrollará durante tres años entre la capital portuguesa, Berlín y París.
Es un momento de pausa, sí, pero también de transición. Un paréntesis en el calendario que la familia aprovecha para estar unida y disfrutar de la intimidad que solo el verano permite, antes de que cada miembro retome su propio ritmo y sus respectivos caminos. Grecia, con sus siglos de historia, sus paisajes serenos, el azul profundo del mar Egeo y un vínculo emocional que trasciende generaciones, se convierte en el escenario perfecto para que los Reyes encuentren un respiro lejos de los focos mediáticos. Un lugar donde la tradición y la familia se entrelazan, y donde el tiempo parece detenerse, al menos por unos días.
Muy pendientes de Jaime Anglada
Sin embargo, no todo es descanso. Desde Grecia, don Felipe y doña Letizia siguen con preocupación la evolución de su amigo personal, el cantante Jaime Anglada, que fue atropellado en la madrugada del viernes 8 de agosto en Palma de Mallorca y permanece ingresa en estado grave, pero sin que su vida corra peligro, en la UCI del Hospital Universitario Son Espases de la capital mallorquina. La última vez que se les vio juntos fue durante la tradicional recepción en el Palacio de Marivent, apenas unos días antes de que se conociera la delicada situación del artista. Al parecer, los Reyes están en contacto directo con Pilar Aguilé, esposa de Anglada, y han pedido ser informados de cualquier novedad sobre su estado de salud.
La relación entre Felipe VI y Jaime Anglada es profunda y cercana. Son amigos desde hace más de dos décadas y comparten su pasión por el mar. El cantante mallorquín y don Felipe han compartido regatas, cenas en Mallorca y momentos musicales. Además, la reina Letizia mantiene una relación cordial con la Reina Letizia, quien ha visitado en varias ocasiones su centro de salud y bienestar en Palma. Así que no es de extrañar ese interés por el cantautor, incluso a kilómetros de distancia.