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Un abrazo cariñoso, espontáneo y duradero, así ha sido el saludo entre el rey Felipe VI y la historiadora y académica Carmen Iglesias, una mujer que fue clave en su formación, tanto académica como personal. El encuentro se produjo en el Palacio de la Zarzuela, durante una audiencia con una representación de la Real Academia de la Historia, y dejó claro que entre ellos hay un vínculo que el tiempo no borra.
© GTRESTras una serie de recibimientos formales, con una leve inclinación de cabeza y un apretón de manos, llegó el momento más entrañable de la mañana: el encuentro de Felipe VI con la que fuera su profesora durante unos años muy delicados de su formación, aquellos que fueron entre finales de los años ochenta y mediados de los noventa, aquellos en los que el entonces príncipe de Asturias tenía que asentarse en su papel e ir afrontando todos los desafíos que le planteaba su formación académica y militar.
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© GTRESEn ese tiempo Carmen Iglesias fue mucho que una profesora de Historia Moderna y Filosofía Política, cuentan que brillante y con un gran sentido del humor, además fue una preceptora, es decir, una figura educativa de confianza que no solo enseñaba, sino que también orientaba y acompañaba al joven heredero en su desarrollo intelectual y personal. Su influencia fue tan significativa que Felipe VI no dudas en mostrar de forma pública el afecto especial que tiene hacia ella, más allá del protocolo.
© GTRESTerminado el acto oficial en el interior del Palacio de la Zarzuela, una audiencia en la que se ha abordado un trabajo que conmemora la primera década de reinado de Felipe VI con una exposición fotográfica y el libro Felipe VI. Perfiles de un decenio (2014-2024), en el que han participado, entre otras instituciones, la Real Academia de la Historia, que la propia Carmen Iglesias dirige, siendo la primera mujer en ocupar este cargo, los invitados se han desplazado al exterior para tomar la tradicional foto de familia. Ha sido entonces cuando se ha visto como Felipe VI le brindaba el brazo a su profesora, que el pasado marzo cumplió los 83 años, para acompañarla hasta allí.
