El comunicado de Laurent de Bélgica admitiendo que tiene un hijo de 25 años nacido antes de su matrimonio con la princesa Claire ha sido del todo inesperado, a pesar de que los rumores llevaban décadas circulando. Ahora sabemos que tras el anuncio sorpresa ha habido muchos meses de conversaciones entre padre e hijo, pero cuando hablamos de un hijo secreto en una casa real, el asunto incumbe inevitablemente a una tercera persona: al Rey. ¿Conocía Felipe de los Belgas la intención de su hermano de hacer pública su paternidad?
La respuesta corta es: sí. Según el periódico belga Het Laatste Nieuws, había sido avisado con antelación por su hermano de su deseo de hacer público el comunicado. El objetivo, además de contar con la opinión del jefe de la Casa Real, era también logístico. Había que dar tiempo a Palacio para tomar una postura ante la tormenta mediática que estaba a punto de desatarse. Según el diario, esta cautela de Laurent fue muy bien recibida en palacio, especialmente viniendo de un príncipe que a menudo se caracteriza por su imprevisibilidad y falta de prudencia.
Con todas las cartas sobre la mesa, la Casa Real decidió dar la callada por respuesta y no hacer comentarios sobre el asunto. La agenda de los Reyes no se ha visto en absoluto alterada por el anuncio y, según algunas fuentes han confirmado a HLN, contemplará un posible reconocimiento oficial. ¿Podría esto significar que habrá un nuevo príncipe en Bélgica?
Para ello haría falta un reconocimiento oficial de la paternidad a partir de una prueba de ADN, tal y como explica el experto real Wim Dehandschutter. Sin ese reconocimiento no podría ser llamado “Su Alteza Real Clément, príncipe de Bélgica, príncipe de Sajonia-Coburgo”. El periodista también señala que el monarca belga, por decreto real de 2015, ya no desea otorgar títulos principescos a “nacimientos de padres ajenos a su familia”. Delphine Boël, la hija de Alberto II nacida fuera de su matrimonio, fue reconocida como hija biológica del rey Alberto por un tribunal en 2020 y tiene el título Princesa y los apellidos de la dinastía.
Clément Vandenkerckhove no es príncipe, al menos de momento, pero ha conseguido acabar con el secretismo que tanto daño le hacía. Nació en el año 2000 de la relación entre su madre, la cantante Wendy Van Wanten y el príncipe Laurent, un romance que escandalizó al entonces rey Alberto, que no paró hasta ponerle fin. Él se crió como hijo de madre soltera, mientras que su padre, tres años más tarde de su nacimiento, se casó con Claire Coombs, con la que tuvo otros tres hijos.
Después de años sin hablarse, Clément acudió al Príncipe casando de ser objeto de la rumorología del país. Quería discutir con él si podría comunicar abiertamente que él era su padre. A finales de 2024, el joven buscó la forma de dar a conocer su historia a través de un documental. De la mano del cineasta Wim De Smet, grabó dos capítulos contando su historia. Clément habla en ellos de su padre, quien no participó en la producción, pero sí aceptó que se pudiera emitir. “mi padre no hizo nada malo, ni mi madre tampoco. Quiero poder vivir una vida normal y que ya no me pregunte constantemente ¿Sabes quién es tu padre? ¿Ya murió? Quiero acabar con eso. Solo quiero ir a tomar una cerveza con mi padre”, cuenta en el documental.