El príncipe Guillermo ha encontrado en Kate Middleton, a su mejor compañera de vida. El matrimonio está más unido que nunca y a pesar de que la enfermedad les ha azotado, ellos cada vez son más piña y están de lo más orgullosos el uno del otro. Kate es el pilar de Guillermo y así lo ha demostrado con unas declaraciones que se han convertido en piropos para su mujer, con la que lleva casado desde 2011.
En su reciente viaje a Gales, durante su visita a la ciudad costera de Colwyn Bay, a donde acudió para apoyar la labor que los jóvenes están haciendo, elogió a su mujer diciendo: "Detrás de cada hombre promedio hay una esposa aún mejor", unas palabras que han dado ya la vuelta al mundo y han puesto de manifiesto el profundo amor y admiración que el futuro Rey de Inglaterra siente por la mujer de su vida.
El Príncipe hizo este comentario después de un líder de uno de los clubes juveniles que visitó contara lo importante que había sido para él el apoyo de su propia esposa. Durante la jornada, Guillermo visitó Youth Shedz, una iniciativa juvenil donde Guillermo escuchó a niños y adolescentes hablar sobre cómo este proyecto les ayuda a afrontar las dificultades escolares y el aislamiento.
El Príncipe también habló sobre la importancia de tener una figura fuerte de apoyo a su lado y de sus rutinas familiares. Enfatizó en la importancia de sentarse a comer juntos y de que los niños no deben estar "cerca de pantallas".
Los príncipes de Gales se han instalado recientemente en su nuevo hogar en Forest Lodge, en Windsor, pero desde hace tiempo y por motivos obvios, tienen una gran conexión con Gales, incluso antes de convertirse en herederos al trono. Guillermo de Inglaterra se entrenó para convertirse en piloto de helicóptero de rescate y vivió en Anglesey en 2010, siendo el primer miembro de la Familia Real británica en vivir en Gales desde Enrique VII, quien lo hizo en el siglo XV. Cuando Guillermo y Kate se comprometieron, él seguía siendo piloto de emergencias y ella hizo su primera visita oficial a Gales unos meses después, en febrero de 2011. Tras su boda, en abril de 2011, Gales fue el escenario de su vida matrimonial y también fue donde pasaron sus primeros meses como padres tras dar la bienvenida a su primer hijo, el príncipe George, en julio de 2013.









