La boda de la princesa María Carolina de Liechtenstein y Leopoldo Maduro ha dejado imágenes imborrables y ha devuelto a la actualidad a la princesa Tatiana, quien en los años 90 sonó como posible candidata a novia de Felipe VI y en la actualidad está casada con un barón y es madre de siete hijos. No ha sido la única. La siempre discreta Familia Principesca se volcó en el enlace y a él acudieron príncipes de lo más discretos de los que apenas hay imágenes. Uno de ellos es el príncipe Alfonso, hijo de los príncipes Maximiliano y Ángela, de ascendencia panameña y el primero de orígenes africanos, nacido en una Casa Real reinante en Europa.
Alfonso Constantino María de Liechtenstein tiene 24 años y es el único hijo del príncipe Maximiliano, hijo del príncipe soberano Hans- Adam II, y su esposa Ángela Gisela Brown de origen panameño. Así que es sobrino del príncipe heredero Alois y de la princesa Tatiana. Hasta el ascenso de Carlos III del Reino Unido, cuando Archie y Lilibet de Sussex se convirtieron en príncipes, Alfonso era el único príncipe europeo de ascendencia africana.
Como en Liechtenstein está vigente la Ley Sálica, que aparta a las mujeres del trono, el príncipe Alfonso ocupa el sexto puesto en la línea de sucesión dinástica. Maximiliano de Liechtenstein conoció a Angela Gisela Brown en Nueva York donde ambos vivían. Se casaron en el año 2000 previo consentimiento del príncipe reinante. Se unieron en un matrimonio civil en Vaduz y la boda religiosa tuvo lugar una semana después en la iglesia de San Vicente Ferrer de la gran manzana. La novia llevó un vestido diseñado por ella misma.
Ángela nació el 3 de febrero de 1958 en Bocas del Toro (Panamá) pero se mudó con sus padres a Estados Unidos cuando era una niña. Estudió diseño de moda en la prestigiosa escuela Parsons y trabajó como diseñadora, incluso creó su propia marca llamada A. Brown que dejó tras casarse. Por su parte, su marido hizo un master en Harvard y estuvo trabajando en Estados Unidos. Desde 2006 es director ejecutivo del LGT Group, un banco privado con una gran influencia financiera en el Principado.
El príncipe Alfonso sigue los pasos de su padre en el mundo de las finanzas. Habla español, probablemente por influencia de su madre. Además de príncipe, es conde Rietberg, un título tradicional dentro la familia. Estudió en la Escuela Internacional de Múnich y luego en el Wellington College, un internado de Inglaterra. Está graduado en Administración de Empresas por la Universidad de Georgetown. Ha trabajado en una firma de capital privado y como analista de inversiones en Leipzig. Desde 2024 trabaja en Onex Credit como analista financiero en Nueva York.