Apenas 24 horas después de que Marius Borg Høiby haya sido acusado de 32 delitos diferentes, entre ellos cuatro violaciones a mujeres distintas, el príncipe Haakon ha dado la cara en la monarquía noruega, en un día un tanto agridulce para su mujer, la princesa Mette-Marit, que este martes celebra su cumpleaños más agridulce.
© GTRESEn una intervención pública ante la prensa, el príncipe Haakon ha hablado sobre la información judicial desvelada este lunes, aunque no ha respondido a ninguna de las preguntas de los medios allí presentes. "Ha sido desafiante y difícil para todos", ha desvelado al medio noruego NRK. Su agenda oficial no le ha dado tregua y, este martes, el marido de Mette-Marit ha tenido que dar la cara y acudir a la inauguración de la feria de piscicultura Aqua Nor, situada en la ciudad de Trondheim, en el centro de Noruega.
"Ya se ha aclarado cuál será la acusación. Ahora le corresponde al tribunal decidir. Por nuestra parte, seguiremos cumpliendo con nuestras tareas", ha afirmado con talante serio. "Todos los implicados en el caso lo han encontrado desafiante y difícil", ha apostillado, dejando claro que la corona noruega va a seguir afrontando sus obligaciones pese al torbellino emocional en el que se encuentra.
© GTRESTras enunciar su última frase, los periodistas han intentado preguntar al príncipe sobre las violaciones a las que acusan a su hijastro, pero la respuesta ha sido nula. Su intervención se ha basado en lo que la prensa ya conoce. Sin duda, esta semana está siendo muy dura para la corona noruega, sobre todo teniendo en cuenta que la princesa Mette-Marit está viviendo uno de sus cumpleaños más amargos. En los últimos doce meses, a la investigación abierta contra su hijo se ha unido el agravamiento de la fibrosis pulmonar que padece y que la ha mantenido apartada de sus compromisos oficiales.
© Getty ImagesDespués de meses y meses de escándalos, el hijo mayor de la princesa ha sido acusado formalmente y podría enfrentarse a una pena máxima de 10 años de cárcel. La Fiscalía ha sido implacable a la hora de valorar la gravedad del caso y ha tildado de "preocupante" que continuase cometiendo delitos incluso después de su detención.
"Este caso es muy grave"
Marius Borg ha sido acusado de 32 delitos diferentes, donde se incluyen 4 violaciones a diferentes mujeres, así como los abusos a su expareja, Nora Haukland, y más actos de violencia hacia otra de sus compañeras sentimentales. A partir de aquí, en caso de ser condenado tras celebrarse el juicio, el 'royal' escandinavo de 28 años podría enfrentarse a una pena máxima de 10 años de cárcel, según establece la legislación de su país.
© Gtresonline"Este caso es muy grave", ha declarado este lunes Sturla Henriksbø, fiscal general del Estado de Noruega, durante su comparecencia ante la prensa. Definía los actos cometidos supuestamente por el hijo mayor de la princesa Mette-Marit como hechos "que pueden dejar huellas duraderas y destruir vidas". Pese a ello, considera que en estos momentos "no se dan las condiciones para detenerlo y encarcelarlo", ya que "lo habitual es hacerlo tras la condena", aseveraba.
© Getty ImagesEste lunes fue una jornada clave en el caso, desde que estallara hace ahora justo un año. Las acusaciones hacia Marius Borg han tambaleado los cimientos de la monarquía nórdica. Recientemente se ha conocido, además, que la última violación de la que se le acusa habría ocurrido el pasado noviembre, después de que la policía lo hubiera detenido ya anteriormente hasta en dos ocasiones -en agosto y septiembre de 2024- y después fuera puesto en libertad. El próximo capítulo previsiblemente será el mediático juicio que aguarda para 2026.
© Gtres
