La llegada al mundo de la princesa Iman supuso también una revolución en la forma de comunicar de la casa real jordana. Las cuentas oficiales de sus miembros se sacudieron ligeramente la institucionalidad para abrir una ventana a la intimidad familiar. A través de ellas transmitieron al público la ilusión por el nacimiento de la hija del príncipe Hussein y mostraron algunas pinceladas de su vida cotidiana, dejándose ver en las estancias privadas de palacio, con ropa cómoda y haciendo carantoñas a la bebé. En esta ocasión el heredero anima a la selección de fútbol jordana con Iman en sus brazos vestida con la camiseta del equipo.
A sus diez meses, aplaude animada por su padre como si fuera consciente de que por primera vez, su país tiene la oportunidad de clasificarse para el Mundial. Esta proeza es un auténtico sueño para el príncipe Hussein, tal y como él mismo ha dicho, y así se lo transmite a su hija. La pequeña, a menudo protagonista de las escenas más simpática compartidas por la casa real hachemita, también conoce la vida oficial ya que con solo ocho meses sus padres la llevaron a su primer viaje oficial. Iman se estrenó en Baréin en una cita similar a la que ha llevado a su abuelo a Madrid.
Abdalá de Jordania se encuentra de viaje oficial en España, donde esta mañana ha sido recibido en el Palacio de la Zarzuela por el rey Felipe. Una estampa mucho más protocolaria e institucional que la protagonizada por su hijo y su nieta, aunque también marcada por la cercanía. Ambas casas reales mantienen una estrecha relación que se remonta a la amistad entre los reyes Juan Carlos y Hussein. Sus hijos han dado continuidad a esa excelente relación y así lo han dejado patente al saludarse con un abrazo.
Precisamente don Juan Carlos y doña Sofía formaron parte de los más de 1700 invitados a la boda de Hussein y Rajwa de Jordania, que acaban de celebrar su segundo aniversario. Fue el ‘sí, quiero’ más importante del siglo en el país de Oriente Próximo y tuvo como escenario el Palacio de Zahran. Para celebrar la efeméride, la casa real difundió una romántica fotografía del matrimonio posando en unos espectaculares jardines. El príncipe Hussein lleva un elegante traje azul oscuro y corbata, mira al frente, mientras abraza a Rajwa por la cintura, quien está de perfil y posa con una amplia sonrisa. La nuera de la reina Rania lleva un vestido largo en color marrón del diseñador de origen ucraniano Peter Petrov.