Niño jugando con chupetero con chupete©AdobeStock

Bebés

¿Cada cuánto tiempo hay que esterilizar chupetes y biberones?

Realizar una correcta higiene de los utensilios más utilizados por tu bebé como son los chupetes y bieberones es fundamental para su salud digestiva. Aquí tienes algunos consejos para saber cómo y cuándo esterilizar estos objetos y mantenerlos en las mejores condiciones.

Si eres mamá o papá de un bebé que usa chupete sabrás que mínimo hay que tener unos cinco o seis (o incluso más) porque siempre se pierden, tu hijo los tira por la calle y no los vuelves a ver o simplemente desaparecen… Estar continuamente recogiendo chupetes del suelo es una constante en tu vida y, por eso, quizás es conveniente recordar cuáles son las pautas consideradas más higiénicas para conservar en buen estado tanto en chupetes como biberones. Y es que, la salud de tu hijo está en juego ya que estos utensilios en malas condiciones de higiene pueden afectar a su sistema digestivo con molestias gastrointestinales, diarreas… La enfermera pediátrica, Nieves Rodríguez (@lactarycrecer) nos da los mejores consejos para la correcta esterilización de estos objetos tan preciados para tu bebé.


¿Por qué es necesario ser correctos con la higiene de chupetes y biberones?

“Chupetes, tetinas y biberones es necesario esterilizarlos cuando no cumplan las condiciones de higiene diarias, especialmente si el bebé es menor de 4 meses, ya que su sistema autoinmune está aún muy debilitado. En ocasiones no es suficiente limpiar las tetinas por lo que hay que esterilizarlos, por ejemplo, si vamos a hacer uso de un chupete o biberón, por primera vez, o si se nos cae en la calle. Un truco muy práctico es llevar varios de repuesto y cuando lleguemos a casa, esterilizar el que se haya caído”, recomienda la experta.

Y es que como decíamos, que el niño vaya arrastrando el chupete por el suelo, lo tire, juegue en el parque con él en la mano… son cosas inevitables, pero con las que debemos tener especial cuidado y no olvidarnos de aplicar las medidas higiénicas al llegar a casa. “Si el chupete cae en el suelo de casa, basta con lavarlo con abundante agua y jabón. No es correcto volver a ofrecer el chupete cuando cae, por ejemplo, en la calle. La inmunidad de los peques se va adquiriendo a medida que entran en contacto con el entorno durante los primeros años de vida. No poseen anticuerpos para la mayoría de los patógenos por lo que inmunizar a tu bebé ofreciéndole de nuevo algo que ha caído en el suelo de la calle, no es la mejor manera de fortalecer su sistema inmunológico”, sostiene la enfermera. Y añade: “Tampoco ‘limpiar’ con saliva el chupete que cae al suelo es una técnica higiénica, por tanto, no se recomienda, ya que el riesgo de pasar al bebé bacterias que están en la boca es muy alto. Como decíamos, es preferible optar por llevar 2-3 chupetes de sustitución por si los necesitáramos. Es la forma más segura e higiénica para los bebés”, afirma.

Biberón y chupete limpios©AdobeStock


Métodos para esterilizar chupetes y biberones correctamente

Una de las grandes decisiones que se toman en la familia a la hora de convenir en la las medidas higiénicas para chupetes y biberones es si usar un esterilizador o bien, hacerlo con el método de toda la vida, es decir, hirviéndolos en una olla con agua. Según estudios realizados al respecto, la temperatura necesaria para eliminar de forma rápida y eficaz todas las bacterias del dispositivo debe ser de al menos 90º C, y en todas las partes por igual. Según asegura la experta: “Las dos opciones son válidas y eficaces, dependerá también de la economía y preferencia de cada familia. Eso sí, sea cual sea el método elegido, se recomienda no esterilizar más tiempo del que recomienda el fabricante para evitar el deterioro precoz de las tetinas”. Los métodos de esterilización que existen son:

Con calor

  • En agua hirviendo: “se recomienda utilizar un cepillo de cerdas suaves para retirar todos los restos de suciedad que puedan quedar adheridos con agua caliente y jabón. Luego los pondremos en un cazo llenamos con agua hasta que queden bien cubiertos y directamente al fuego durante 5-10 minutos máximo”, dice la enfermera.

Al vapor 

  • En el microondas: “este método es rápido y seguro, se utiliza un recipiente apto para microondas con tapa o esterilizador de biberones para microondas, se añade un poco de agua y se cierra, durante el tiempo que indique el fabricante. Es importante tener en cuenta que, si no se van a usar en el momento, los biberones y los chupetes se mantienen estériles en el recipiente tapado durante 24h”, recomienda.
  • Otros métodos opcionales: “esterilizadores eléctricos para biberones que podemos encontrar en tiendas de puericultura o grandes superficies. Son recipientes automáticos que se pueden programar y cuando termina el proceso de esterilización se apagan solos”.

En frío

  • En un recipiente: “este tiene que ser lo suficientemente grande para que quepan chupetes y biberones. Llenar con agua hasta que queden bien cubiertos y añadir líquido desinfectante específico para limpiar tetinas y biberones, en la cantidad y tiempo que recomiende el fabricante”
  • Otra opción en frío: “directamente con el líquido esterilizante específico para tetinas y biberones. Llenar el recipiente hasta que los chupetes y biberones queden cubiertos y dejar actuar durante el tiempo que recomiende el fabricante”.

Cada cuánto tiempo tengo que esterilizarlos

Los expertos dicen que no es necesario estar esterilizando las tetinas del chupete y del biberón en cada uso, ya que basta con una correcta higiene con abundante agua y jabón.

Sin embargo, la experta advierte: “Hay que tener especialmente cuidado con los bebés de alto riesgo como los prematuros, con alguna enfermedad o inmunodeprimidos. En estas situaciones sí se recomienda esterilizar de manera frecuente”. Pero, claro, también hay ocasiones en las que nos es imposible esterilizar de forma minuciosa, así que, en estos casos, se recomienda lavar bien el chupete con agua caliente y jabón aclarándolo con abundante agua y esterilizar en cuanto se pueda.

Y, por último, otra de las dudas más frecuentes para muchos papás es: ‘¿Cuándo debo cambiar el chupete o el biberón de mi hijo?’ A lo que la enfermera responde: “Los chupetes pueden desgastarse en el tiempo por múltiples factores, por lo que se recomienda, de manera generalizada, cambiar cada 1-2 meses. Si se deteriora antes, sobre todo, en peques que ya tienen dientes, hay más riesgo de rotura, por eso es importante revisar la tetina tanto del chupete como del biberón antes de cada uso y así asegurarnos que está en óptimas condiciones para ofrecer. La duración de la tetina dependerá del material. Es importante elegir un chupete que cumpla con la normativa de seguridad de la Asociación Española de Normalización y Certificación”, asegura la experta.

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