Del texto al diseño: todo lo que debes tener en cuenta al elegir tus invitaciones
Resolvemos las dudas más frecuentes
Elegir un menú que guste a la mayoría de los invitados, buscar centros de mesa bonitos y muy decorativos, pensar en la música... La lista de decisiones que los novios deben tomar sobre su boda es bastante grande. Entre las tareas imprescindibles está la de seleccionar la papelería nupcial y, claro está, las invitaciones de boda. Esa primera toma de contacto con el enlace que suele generar muchas preguntas a las parejas. ¿Con cuánto tiempo es conveniente encargarlas? ¿Mejor diseños en papel o save the date digitales? ¿Qué texto hay que poner? Para ayudarte, resolvemos las dudas más frecuentes.
¿Invitaciones en papel o digitales?
Aunque muchos novios eligen las redes sociales para anunciar su enlace, donde publican divertidos posados en los que muestran el anillo de compromiso, a la hora de comunicarse con sus invitados prefieren una forma más tradicional. Las invitaciones impresas siguen siendo la opción elegida por un 84% de las parejas, un porcentaje muy elevado que apuesta por los diseños más variados y sorprendentes. "Pienso que, a la larga, las parejas van a seguir prefiriendo para su gran día producir invitaciones que puedan entregar en mano y guardar de por vida", explica María Muñoz, fundadora de The Spaniel Studio.
¿Invitaciones en papel o digitales?
Sin embargo, la nueva realidad ha hecho que muchas parejas se vean en la necesidad de comunicar nuevas fechas a los invitados y mantenerlos informados en todo momento de las novedades. "Muchas parejas que se han visto obligadas a aplazar sus fechas y que ya habían enviado sus invitaciones han visto que estos diseños digitales eran su mejor alternativa", explica la experta de The Spaniel Studio.
Estos save the date digitales se trabajan del mismo modo que las invitaciones convencionales. Eso sí, su precio es menor y el proceso "más ágil porque no requiere de sus plazos de producción: una vez los novios están felices con su diseño se lo mando en el formato adecuado para que puedan enviarlo a sus invitados directamente", concluye.
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¿Qué diseño elegir?
Una vez que los novios tengan claro si quieren una invitación en papel o si prefieren un diseño digital llega el momento de decidir el estilo de la misma. Aseguran los que más saben de bodas que la invitación, al ser el primer contacto que los asistentes tienen con el enlace les ayudará a hacerse una idea del tipo de evento al que acudirán.
En este caso, igual que sucede con el vestido de la novia o el resto de pormenores relacionados con la organización del gran día, lo mejor es que la personalidad de los novios se refleje en ellas. Así, si son clásicos, detallistas o rompedores los invitados lo tendrán claro desde el primer momento.
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¿Qué diseño elegir?
Colores pastel, acuarelas, diseños relacionados con la estación en la que se va a celebrar la boda, con el viaje de novios... las opciones son, por suerte, casi infinitas. Pero las invitaciones no son la única papelería que forma parte del gran día. Para que exista una coherencia entre misales, protocolos, seating plan y éstas y el resultado sea perfecto, es importante elegir un mismo hilo argumental para toda la papelería. Por tanto, además de buscar un diseño que encaje con la personalidad de los novios, es importante tener en cuenta el lugar de celebración o la decoración del mismo. Solo así todo guardará relación.
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¿Qué texto elegir?
En las invitaciones, como en todo lo que rodea una boda, hay ciertos protocolos. Pero, en este caso, cada vez son más flexibles y el texto se adapta a las necesidades de cada pareja. Dependerá así de los gustos, la formalidad del enlace y la cantidad de invitados. Si se trata de una ceremonia pequeña se puede optar por palabras cercanas, mientras que en celebraciones más grandes lo mejor es elegir líneas más formales. Sin embargo, sí recomienda mantener ciertos aspectos. Por ejemplo, a la hora de incluir el nombre de los padres.
¿Es importante la caligrafía?
Sí, sin duda. Al cuidar tanto la papelería nupcial, la caligrafía adquiere cada vez más peso. En los últimos años se está experimentando una recuperación del trabajo artesano. "Poco a poco se va quitando esa idea de que este trabajo es muy caro e inaccesible y cada vez son más las parejas que entienden que, por ejemplo, entregar unos sobres caligrafiados es la presentación de lo que será su boda", explica Bego Viñuela, creadora de Caligrafía Bilbao.
La experta asegura que en este campo, como en todos, hay "básicos" con los que no fallar nunca: "Yo siempre apuesto por la caligrafía inglesa en su versión más clásica o más libre y moderna. Ambas tienen un diseño atemporal con la que los novios se sienten seguros e identificados. Hay que pensar que con la invitación de una boda también se representa a ambas familias y ellos también deben sentirse cómodos entregándolas. Y si hablamos de riesgo... por ejemplo, nunca usaría una caligrafía gótica, a no ser que la boda se celebrara en una fábrica de cerveza o en el castillo del Conde Drácula", nos cuenta divertida.
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¿Con cuánto tiempo conviene encargar las invitaciones?
Dada la situación que estamos viviendo hablar de tiempos es complicado. Sobre todo porque muchos novios se han visto en la obligación de aplazar su enlace. Lo normal es empezar la búsqueda del diseño perfecto cuanto antes para poder descubrir qué gusta y qué no sin prisa. El encargo sería necesario hacerlo con unos 5 o 6 meses de antelación, tiempo suficiente para que los novios las tengan a su disposición al menos 4 meses antes del gran día.
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¿Cuándo hay que entregarlas?
Unos dos o tres meses antes de la boda. Eso sí, si los invitados viven fuera o existen problemas con el alojamiento, es recomendable darlas lo antes posible para que los asistentes puedan planificar su viaje.