El vestido de novia se lleva una buena parte del presupuesto de cualquier boda. Junto con el banquete y los extras de la ceremonia, es la partida en la que más invierten las prometidas. En nuestro país, el coste medio de un diseño nucial ronda los 1.800 euros. Pero por supuesto puede variar dependiendo de si se trata de un vestido confeccionado a mano, del diseñador, los tejidos que se utilicen en su elaboración, los detalles que se incluyan (bordados, pedrería…) o el tiempo dedicado a la creación. Por eso no sorprende que esta cifra esté muy alejada del presupuesto que las royals suelen invertir en esta prenda. Hemos querido recopilar algunos de los inolvidables vestidos de novia que han llevado las mujeres de la Familia Real Británica. Del más al menos caro: ¿cuánto invirtieron algunas de las novias más inspiradoras?
Katte Middleton
El vestido de novia de Kate Middleton sigue siendo, 9 años después de su enlace, uno de los más imitados. La prenda, diseñada por Sarah Burton para Alexander McQueen recordaba, en cierto modo, al que Grace Kelly llevó en su boda con Rainiero de Mónaco. La prenda, con escote corazón, mangas y espalda de encaje y una cola de cerca de tres metros de longitud, tenía 58 botones cubiertos de gazar y organza en la espalda y bucles rouleau. Además, el encaje que recorre todo el diseño, fue creado por la Royal School of Needlework, con sede en Hampton Court Palace, y hecho a mano. Detalles que elevan hasta cerca de 278.000 euros el precio del vestido que lució la duquesa de Cambridge en su enlace y costearon sus padres.