Verano
No importa si la boda se celebra por la mañana o por la tarde, lo cierto es que durante los meses que conforman esta estación las temperaturas suelen ser bastante elevadas. Una condición que, a la hora de elegir los platos que compondrán el menú, se suele tener en cuenta. Muchos novios apuestan por cremas o sopas frías, y segundos platos que no sea necesario comer muy calientes. A la hora de elegir el postre, es bueno huir del chocolate –o al menos de dulces en los que sea el único protagonista– porque, aunque la tarta esté refrigerada hasta el último momento, las posibilidades de mancharse son grandes. ¿Una buena alternativa? La tarta de frutos rojos. Esta, con una pinta tan deliciosa, es de Las tartas de Zarina.