Son muchos los detalles que hay que tener en cuenta antes de elegir el calzado que llevará la novia. Además de encajar con el estilo de cada mujer y de su vestido, tener un color que armonice con el resto del look y prestar atención al resto de complementos, es imprescindible tener en cuenta el lugar en el que se va a celebrar la boda. Si va a ser un evento campestre, los stilettos quedan descartados; pero, si por el contrario, se celebrara en un hotel de lujo, los diseños más casual son los que quedarán prohibidos. Y es que cada lugar demanda un tipo de zapato.
En la playa
Cada vez más parejas eligen un lugar, con vistas al mar, para celebrar su enlace. Este paisaje idílico suele condicionar el vestido de las novias, que optan por diseños livianos y minimalistas, con siluetas poco elaboradas. Aunque las sandalias parecen la opción más evidente para este lugar, los botines suelen ser un buen aliado contra la arena y dan un aire rompedor al look.
Botines con cordones y tacón cómodo, con efecto metalizado, de Brenda Zaro (134,95 euros).
Botines en color nude, con cremallera lateral en contraste, de Wonders (115 euros).
En el campo
Aunque las fincas suelen convencer a la mayoría de parejas para celebrar su enlace, cada vez son más los que optan por un terreno más agreste. Si eres amante del campo, sabrás que no todos los zapatos son aptos para caminar sobre tierra. Opta por modelos cómodos y sin tacón o, si lo tienen, que no supere los cinco centímetros. Con ellos podrás caminar durante todo el día y bailar hasta que el cuerpo aguante.
Zapatos con escote en 'V' y tacón cuadrado mini, de Gioseppo (30 euros).
Zapatos bicolor destalonados, tipo mocasín, de Alohas (120 euros).
Zapato destalonado con efecto piel y tacón cómodo, de Mint & Rose (159 euros).
En la ciudad
Un hotel en el centro de la ciudad también puede convertirse en un enclave de sueño para celebrar una boda. Lo mejor de este tipo de espacios es que permiten lucir zapatos o sandalias con tacón alto y fino, sin miedo a que resulte demasiado incómodo caminar con ellos. Además, los colores claros vuelven a ser una opción para estos lugares en los que el polvo no es un problema.
Zapatos combinados de PCV con cristales de Swarovski al tono, de Magrit (420 euros).
Sandalias doradas con hebilla tipo joya, de Pedro Miralles (169 euros).
Salones de terciopelo con detalle, tipo joya, en el empeine, de Manolo Blahnik (925 euros).
En una finca
Suelen estar ubicadas en las afueras de las ciudades. Y aúnan los beneficios de un evento celebrado en el campo y en la urbe. Aunque el terreno no es tan complicado como el del primero, sí es preferible optar por un calzado que tenga el tacón ancho o cuña. Así asegurarás tu comodidad y evitarás que el tacón se clave en el césped o entre las piedras pequeñas.
Mules de piel vuelta con tacón de fantasía, de Paloma Barceló (275 euros).
Zapatos tipo alpargata, con detalles de esparto rosa, de Castañer by Manolo Blahnik (395 euros).
Salones con tacón cómodo y detalle de lazo zapatero, de Silvia Lago (159,90 euros).