Cada mes de enero, damos por inaugurada una nueva temporada de premios, oportunidad para conocer los rostros célebres del cine que veremos en todos lados de aquí en adelante. Ante la grave crisis a la que se enfrentan los Globos de Oro, la habitual primera cita del calendario, no pudimos ser testigos entonces de los lookazos de las estrellas ni echar un ojo a las jóvenes promesas de estilo que despuntan este 2022. Una de ellas, a pesar de todo, resulta tan llamativa que no ha escapado nuestro radar. Se trata de Alana Haim, la melliza rockera y musa de las marcas de moda de lujo que por fin debuta como actriz. Y lo hace a lo grande, con Licorice Pizza, del director Paul Thomas Anderson, que llega la próxima semana a cines españoles.
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Alana Haim, la inesperada nominada que triunfa con su banda
No sería la primera vez que una cantante de éxito incursiona en el mundo interpretativo, pero sorprende que en su primer papel, Alana Haim haga casi de sí misma: una veinteañera apasionada y cautivante en la California de los años 70's, período en el que las vanguardias musicales estaban aún por desarrollarse en su máxima expresión. Allí residen en tiempo y espacio sus mayores influencias, tanto estéticas como artísticas. Haim, el grupo que tiene con sus hermanas Este y Danielle, es única en su especie dentro del rock contemporáneo, pues desmontan las barreras del género para construir un nuevo paradigma en el que también podríamos encajar a Phoebe Bridges o St. Vincent.
HAIM: hermanas, roqueras y musas
En 2021, ella y sus hermanas hicieron historia en los Premios Grammy al convertirse en la primera banda conformada únicamente por mujeres que conseguía una nominación en la categoría de Mejor Álbum por su último lanzamiento Women in Music Pt. III. Para la señalada ocasión, Prada se ofreció a vestirlas con trajes a juego y hechos a medida, marcados por el minimalismo y cierto aire futurista. Es justamente esa actitud desenfadada y cool de las roqueras modernas, que no se limitan al cargado delineador negro y las camisetas estampadas, la que enamora a la industria del lujo.
Invitadas habituales en la Semana de la Moda
Para una histórica presentación de la colección Primavera/Verano 2017 de Dior en el Museo Guggenheim de Nueva York, la banda hizo de anfitriona con dos looks igual de simbólicos: un traje rojo exclusivo para ellas y piezas más casuales de la propia colección. Entre camisetas de mensaje feminista, vaqueros y cintas plagadas del logo J’Adior, las hermanas se presentaron ante un público VIP que reconoce su poder de influencia. Ya habían acudido al debut de Claire Wright Keller como directora creativa de Givenchy y disfrutaron de sus bien merecidos sitios en el front row de los desfiles de Valentino, Chanel o Stella McCartney. Todas alinazas de lujo que mantienen en la actualidad.
En sus inicios, era justamente esa energía setentera de la Costa Oeste que mencionábamos al inicio, representada por vaqueros desgastados Levi's, botas de media caña o zapatillas Converse y camisetas de bandas vintage, la que les ganó una legión de seguidoras y el cariño de las marcas. Paradójicamente, ha sido este último resultado el que las ha acercado hacia el romanticismo de los vestidos largos estampados, los salones de tacón kitten y las minifaldas de tweed que antes les hubieran resultado más que ajenas.
