El día que Victoria Beckham cambió las reglas del nuevo sexy

La diseñadora recicla un look parisino en Londres, pero cambia radicalmente de imagen al incorporar una prenda impactante e inusual en ella

Por Luis Javier Merino

Falda negra larga hasta los pies y sandalias planas de cuero al tono, Victoria Beckham encontró en esta fórmula su uniforme favorito para dar la bienvenida al verano. Fue en París donde nos presentó este estilismo, al que acompañaba con una blusa blanca de algodón y corte clásico. Unos días después, recreaba esta combinación con la misma camisa y las mismas prendas, pero en el mismo color para crear un total look. Ahora, vuelve a confiar en estas apuestas parisinas, aunque las traslada a Londres. Una ocasión y una nueva ciudad que le lleva a incorporar una prenda estratégica que destapa su imagen más sexy y se adapta a temperaturas más elevadas.

Para lograrlo, estrena un top lencero con encaje y estratégicas transparencias, pues llegan hasta el límite de la insinuación. Una prenda de tendencia que entra a formar parte de su vestidor más inesperado y sensual. Se trata de una pieza de lencería de la firma Fleur du Mal (214 euros), y que se puede combinar con una braguita tipo short a juego (110 euros).

A pesar de que su apuesta podría ser muy sobria y anacrónica al decantarse por un total look en negro y una falda larga que cubre sus pies, con el juego de transparencias y encaje logra una imagen completamente radical. Se adapta así al verano y rompe con el acabado más formal que otorgaba a su imagen la blusa blanca con la que estrenaba esta combinación.

Además, no solo conserva la falda, sino también los complementos. Ocultando su rostro, Victoria Beckham confía en unas gafas de sol en pasta y forma de aviador. Son de Céline y se pueden adquirir por 390 euros. Del mismo sello francés es su calzado, unas sandalias con tiras de cuero, de su colección de otoño 2016.