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La tradición manda con motivo de la celebración de Halloween. Un año más, la Casa Blanca se convirtió en un campo de calabazas y en reunión de decenas de niños disfrazados esperando a recibir sus dulces como parte de la popular actividad del trick-or-treat. Una vez más, los encargados de entregar a todos los presentes su golosina o chocolatina en la zona sur de la residencia presidencia fueron Donald y Melania Trump. Y en una estrategia de moda muy estudiada, la primera dama volvió a sorprender con un nuevo abrigo caro y en clave retro siguiendo la fórmula con la que sorprendió también en 2018.
Hace un año, Melania Trump estrenaba un abrigo amarillo con estampado de cuadros de la firma italiana Bottega Veneta valorado en 2.900 euros. Un diseño que recordaba a los gustos que triunfan en el vestidor de las royals británicas y que seguía los dictados de la moda de los años 60. En este año, su elección hace un guiño al lado más rebelde de los 70, lo que ha generado un debate en redes que augura que esta ya tradición estilística podría llevarle a estrenar en 2020 una creación de estética ochentera.
En esta ocasión, Melania Trump ha optado por moda del país y ha fichado un diseño (5.400 euros) que se presentó en la pasarela de la New York Fashion Week temporada otoño-invierno 2019-2020. Con acabado patchwork y cinturón que sigue los dictados que gustan a la primera dama, este abrigo está inspirado en la estética hippie que causó furor los años posteriores al significativo Festival de Woodstock del verano de 1969.
Para combinar su nuevo abrigo, Melania Trump busca un calzado básico de diseño clásico y que rebaja la intensidad estilística de su potente estreno. Concretamente, lleva unos salones negros, modelo BB de Manolo Blahnik. Curiosamente, son los mismos que también eligió para su look de Halloween el pasado año.
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