Melania Trump anticipa el relevo del pantalón pitillo y la camisa blanca

La primera dama comienza a dar pistas de su nuevo estilo de temporada, en clave 'working' y de inspiración militar

Por Mara Mariño

Si de algo puede presumir Melania Trump desde que se convirtió en primera dama es de seguir sorprendiendo con sus looks. Y es que tras dos años formando parte de la Casa Blanca, la esposa del Presidente ha convertido su estilo personal en un radar de tendencias. El último ejemplo tuvo lugar este domingo, a su llegada a Washington D. C., ocasión en la que recurrió a tres prendas tan clásicas como atemporales y favorecedores a cualquier edad. Eso sí, sin perder de vista lo que dictan los grandes diseñadores. Prada, Stella McCartney y la también italiana Miu Miu mostraron hace unos meses en la pasarela Otoño/invierno 2019-2020 lo que la primera dama llevó a cabo con su estilismo: una tendencia militar muy sofisticada, que podría pasar por power dressing gracias al componente estético que lo relaciona con el ámbito laboral. Una manera de adelantarse no solo a lo que está por venir en los próximos meses sino de anticiparnos cuál va a ser una de sus tendencias predilectasla próxima temporada.

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El color azul y Ralph Lauren se trata de una ecuación que, en otras ocasiones, le ha dado un buen resultado. De hecho, fue en el Día de la Investidura cuando la primera dama apareció con un diseño de la firma americana con el que, los fans de su estilo, sintieron un ramalazo de nostalgia por el parecido con Jackie Kennedy. Y si en 2017 había triunfado, quiso repetir la estrategia este fin de semana en clave casual, recurriendo a una de las prendas imprescindibles del armario: la camisa. Si entre la royals Rania de Jordania es la mayor defensora de este eterno básico, Melania estoda una experta en coleccionar camisas sacando el máximo partido a la prenda con pequeños detalles de estilo, como llavarlas por dentro de faldas y pantalones y con las mangas dobladas.

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También fue combinada con unos pantalones cargo para restarle formalidad. Algo que rebajaba el estilismo de estética laboral volviéndolo menos serio sin dejar de ser elegante. ¿El truco de la primera dama? Llevar una prenda para la parte de abajo más informal, sí, pero en un color oscuro, ya que son las tonalidades más elegantes se pueden utilizar para equilibrar la combinación. De cintura alta y con el bajo elástico y fruncido, cerrado con botones metalizados, los pantalones de Melania hacían juego con los zapatos a tono en verde oliva. Una manera de ceñirse al bicolor demostrando que no siempre es necesario llevar prendas estampadas o complementos para lucir un look redondo.

Fiel a dejar su melena suelta y con mucho movimiento, Melania optó por unas ondas amplias en la zona de las puntas que iban despeinadas creando un efecto desenfadado, el peinado al que suele recurrir en la mayoría de sus citas oficiales. Unas gafas de sol modelo aviador fueron el toque final de la mezcla de la primera dama. Combinación en la que también incluyó un maquillaje muy natural, en el que se limitó a darle algo de color a las mejillas y un pintalabios en color rosa empolvado.