Amelia Bono ha vivido este domingo uno de esos días que se quedan para siempre en la memoria familiar. Con motivo del 75 cumpleaños de su padre, José Bono, la familia organizó una fiesta sorpresa en Toledo cargada de emoción, detalles y momentos inesperados. Una celebración íntima y alegre en la que no faltaron las risas, el baile y una gran tarta de chocolate. En medio de este ambiente tan especial, Amelia apareció con un look que no pasó desapercibido: moderno, con guiños roqueros y un punto atrevido que confirma que atraviesa una buena etapa personal. Y no es casualidad. La empresaria vive un momento muy dulce, tanto a nivel emocional -con una nueva pareja a su lado- como estilístico, arriesgando más que nunca y divirtiéndose con la moda.
Piel, actitud y referencias rock: un look que habla de fuerza
Para una ocasión familiar, pero con carácter festivo, Amelia ha optado por un conjunto dominado por la piel, uno de los materiales más potentes de la historia de la moda. La pieza central fue una cazadora de cuero oversize, de estética híbrida entre lo motero, lo roquero y lo aviador. Un tipo de prenda con profundas raíces culturales que se popularizó en los años 50 como símbolo de rebeldía y que, desde entonces, ha ido reinventándose sin perder su fuerza. Amelia la ha combinado con unos pantalones cortos negros, también de piel, creando un conjunto monocromático contundente, moderno y muy alineado con las tendencias actuales de otoño-invierno. El resultado es un look cómodo, unisex en espíritu y con un claro aire ochentero, que encaja a la perfección con su nueva forma de entender el estilo: sin miedo y con personalidad.
El jersey rosa como punto inesperado del conjunto
El toque diferencial del estilismo llega con un jersey rosa de punto, corto y de canalé, con media cremallera y cuello versátil. Una elección estratégica que rompe con la sobriedad del negro y aporta frescura al conjunto. Este recurso recuerda a la llamada teoría del “rojo inesperado”, tan utilizada en estilismo, pero adaptada a un rosa vibrante que ilumina el rostro y rejuvenece el look. Colocado de forma relajada, incluso sobre los hombros, el jersey demuestra cómo una sola prenda llamativa puede transformar un outfit monocromático sin restarle coherencia. Es un ejemplo perfecto de cómo Amelia juega con el equilibrio entre lo cañero y lo femenino.
Accesorios con carácter y un 'beauty look' muy actual
En cuanto a los complementos, Amelia ha rematado el conjunto con un cinturón de hebilla XL de inspiración western, reforzando ese aire roquero y añadiendo un guiño a una de las grandes tendencias del momento. Completa el look con medias tupidas negras, ideales para los días fríos, y unas botas altas de piel negra con tacón. Un diseño especialmente favorecedor que, al mantener la continuidad cromática con medias y pantalones, estiliza la figura y alarga visualmente las piernas. El bolso bandolera negro y los pendientes de aro aportan funcionalidad y sencillez. En el apartado beauty, apuesta por uñas burdeos -un clásico infalible en época navideña-, maquillaje natural con ojos marcados en negro, piel luminosa y labios nude. El cabello, con un recogido pulido, equilibra a la perfección la fuerza del look.
Amelia Bono y su giro estilístico más atrevido
Este look no es un caso aislado, en los últimos meses, Amelia Bono se ha atrevido con las tendencias del momento y las ha llevado desde una perspectiva personal. Lo demostró recientemente en el concierto de Manuel Carrasco, donde sorprendió con unas botas cowboy de Zara con las que parecía una veinteañera, o con sus vaqueros anchos, favoritos de la generación Z. A esto se suman sus looks en Nueva York, ciudad a la que viajó para correr su primera maratón, y donde combinó moda urbana, prendas deportivas y looks relajados con total naturalidad. Amelia ha encontrado un lenguaje propio que conecta con mujeres de distintas edades y que refleja su momento vital.
Una fiesta sorpresa llena de emoción para José Bono
El 75 cumpleaños de José Bono ha sido mucho más que una celebración. El expolítico, que siempre ha declarado que su mayor orgullo es su familia, estuvo rodeado de sus cuatro hijos y sus cinco nietos, su auténtica debilidad. La fiesta sorpresa estuvo cuidada al detalle: decoración especial, una gran tarta de chocolate y un divertido engaño que no esperaba. Uno de los momentos más comentados fue el baile que protagonizó con su exmujer, demostrando la buena relación que mantienen. Una jornada marcada por el cariño, la complicidad y la celebración de la vida.
Un nuevo amor y una etapa serena y feliz
A este momento familiar se suma el gran cambio personal que atraviesa Amelia Bono. Tras su separación de Manuel Martos en febrero de 2024, después de 15 años de matrimonio y cuatro hijos en común, la empresaria ha vuelto a ilusionarse. Su nueva pareja es Alejandro Reina, su entrenador personal, a quien presentó durante su viaje a Nueva York. Fue la propia Amelia quien quiso compartir la noticia en Instagram con un mensaje sincero y emotivo, en el que hablaba de una etapa tranquila, feliz y en calma. Una publicación acompañada de una imagen en Central Park, cerca del Jacqueline Kennedy Onassis Reservoir, tomada durante su viaje para correr la maratón. Manuel Martos, por su parte, no ha dudado en celebrar públicamente esta nueva etapa de la madre de sus hijos, confirmando la cordialidad y el cariño que siguen manteniendo. Amelia Bono vive un presente emocionante, y su estilo —más libre, más atrevido— es el mejor reflejo de ello.










