Después de acoger hace tres semanas a los reyes Felipe y Letizia, el presidente de la República China Xi Jinping y su mujer, la primera dama, Peng Liyuan, han recibido ahora al primer ministro francés, Emmanuel Macron, y su esposa, Brigitte Macron. Ha sido un viaje de tres días de gran importancia internacional, centrado en reforzar lazos entre ambos países y la cooperación para la resolución del conflicto ruso. Más allá de la apretada agenda de negocios y diplomacia de alto nivel, que ha abarcado desde cruciales conversaciones sobre la paz en Ucrania hasta acuerdos multimillonarios con ejecutivos de las principales empresas francesas, los Macron han demostrado una vez más su innato sentido del estilo y han reafirmado el poder comunicativo de la moda.
© GTRESCon Brigitte como foco de atención en este tipo de cuestiones, cada aparición pública ha sido un desfile de elegancia parisina, pero no solo eso, sino sus estilismos, al igual que los de su homóloga china, han hablado por ella. "Hay muchos mensajes ocultos que merece la pena analizar. Los conjuntos elegidos para este tipo de viajes en los que saben que todo el mundo va a estar mirando no dejan ningún detalle al azar, por mínimo que parezca. Tanto la imagen general del look como el color se escogen siempre por algo, hay que tener en cuenta que tienen muchos asesores y estilistas tras ellas" señala Paula Callejo, editora de moda en ¡HOLA!.
© GTRESEn la recepción oficial al matrimonio presidencial, ambas optaron por conjuntos muy fieles a su esencia y que reflejan a la perfección sus estilos. Brigitte Macron posee una estética muy reconocible: confianza absoluta en el corte, las líneas limpias y, sobre todo, el monocromatismo. Pocas figuras políticas utilizan los looks de un solo color (casi siempre blanco, azul medianoche o nude) con tanta elegancia y efectividad. "Estas elecciones minimalistas no solo alargan visualmente su silueta, sino que también proyectan una imagen de autoridad discreta, se mantiene en un segundo plano, pero, a la vez, dice 'aquí estoy yo'. Las chaquetas estructuradas y los vestidos por encima de la rodilla se han convertido en sus señas de identidad, mediante las que reinventa el protocolo clásico de primeras damas con un toque juvenil sin renunciar al chic parisino" explica Paula.
© GTRESPara la ceremonia de bienvenida en el Gran Salón del Pueblo, Brigitte escogió un conjunto que sigue las citadas características, esta vez en un tono empolvado muy sutil que teñía tanto el abrigo de paño clásico como el vestido recto bajo él y que dejaba clara su intención de ceder el protagonismo y de mantenerse en un segundo plano, a la vez que transmite transparencia y pureza. Como siempre, salones de tacón fino a juego y un bolsito de mano de Louis Vuitton.
© GTRESPor su parte, Peng Liyuan eligió, como suele hacer en este tipo de citas, un diseño moderno y elegante que incorpora elementos de la moda tradicional china, como el cuello mandarín y los botones forrados que recorren el frente. Además, resulta significativa la elección del color, un rojo intenso al que también recurrió en la visita de los reyes Felipe y Letizia.
© GTRESEl poder del rojo en la diplomacia
Hemos recalcado en numerosas ocasiones el significado tan potente del color rojo en los looks de las royals, puesto que evoca seguridad, fuerza y determinación, pero, en la cultura china, tiene otras connotaciones. "En China, el rojo, o hóng sè, es uno de los tonos más importantes, algo que queda claro de primeras gracias a su bandera. Culturalmente, está asociado a la buena suerte, la felicidad y la prosperidad, por lo que se utiliza recurrentemente en festivales, celebraciones como Año Nuevo e, incluso, las bodas, para atraer la fortuna" señala Paula Callejo. "El hecho de que la Primera Dama lo escoja al recibir a mandatarios en actos tan señalados tiene un gran simbolismo. Hay un deseo de fortuna, prosperidad, éxito y buenos negocios, así que lucirlo en su primer acto del viaje es una auténtica declaración de intenciones, busca construir y cooperar junto a los Macron para cimentar una exitosa relación bilateral que marque un antes y un después".
© GTRES"Son dos de las figuras más observadas en todo el mundo en cuestiones de moda, cada vez que asisten a un acto público, se analiza al detalle lo que llevan, cómo lo llevan y por qué lo llevan. Al igual que ocurre con las reinas, princesas y duquesas, han tenido que aprender a comunicar a través de su ropa. Ambas tienen en común que les encanta reinventar los looks tradicionales sin salirse del protocolo, y tienen un sentido de la moda y las tendencias muy marcado" señala Paula.
© GTRESEjemplo de ello son los estilismos que llevaron para visitar el Sistema de irrigación de Dujiangyan, evento en el que coincidieron al apostar por el marrón chocolate. "Es un color de pura tendencia, evidentemente, pero el hecho de que lo luzcan a la vez, cada una adaptándolo a su esencia, no deja de ser significativo y reafirma su sintonía, algo que, con la situación política actual, es muy importante".
© GTRESEso sí, como decimos, cada una se lo llevó a su terreno. Mientras que Brigitte eligió una de sus adoradas chaquetas estructuradas con botonadura frontal al estilo militar, Peng cedió el foco a un impresionante abrigo de inspiración oriental con cuello elevado y manga amplia cuajado de delicados bordados y troquelados florales.
