El legendario baile parisino Le Bal des Débutantes que, desde la década de 1950, presenta en sociedad a algunas de las jóvenes más influyentes del mundo, es una de las citas más esperadas del calendario social de la aristocracia y de las altas esferas. Su edición de 2025, celebrada el 29 de noviembre en el Shangri-La Hotel de París, volvió a convertir la capital francesa en una pasarela histórica donde la realeza y las dinastías empresariales se mezclan con looks de Alta Costura, joyas históricas y tradición.
© Le Bal / Borde / Moreau / BestimageEn esta ocasión participaron 19 debutantes de 12 países, muchas de ellas descendientes de casas reales europeas, herederas de grandes imperios económicos y futuras figuras del mundo del arte, la moda —como la nieta de Carolina Herrera— o las finanzas. Cada una lució un vestido creado especialmente para la ocasión y, lo más fascinante, joyas históricas que rara vez se ven en público: piezas procedentes de subastas, tesoros familiares de alto linaje y tiaras que han pasado de generación en generación.
Esta es la selección de las joyas más espectaculares de la noche.
© ©Le Bal / Borde / Moreau / BestimageEulalia de Orleans-Borbón: una tiara de archiduquesa
La joven española de 19 años —políglota y descendiente directa de la rama española de los Borbones— deslumbró en su debut con un diseño de Tony Ward Haute Couture. Estudiante de Economía y Finanzas en St Andrews y ahijada del Rey Juan Carlos, Eulalia fue una de las presencias más comentadas de la noche. Para coronar su look llevó una tiara de diamantes perteneciente a la archiduquesa Marie Anne de Austria, una pieza que también ostentó la princesa Elie de Bourbon-Parme y que fue subastada en 2018 en la célebre venta Royal Jewels from the Bourbon Parma Family de Sotheby’s. Un tesoro de linaje imperial que convirtió su aparición en un guiño directo a sus raíces.
© ©Le Bal / Borde / Moreau / BestimageIsabelle d’Orléans: una joya real 'Belle Époque'
La benjamina de los hijos del duque y la duquesa de Chartres regresó a París desde Londres —donde estudia Administración de Empresas en ESCP— para debutar igual que hizo en su día su hermana Hélène. Con un vestido de Antonio Grimaldi y acompañada por su primo Constantin d’Orléans, Isabelle encarnó la elegancia clásica de su casa familiar. Su joya principal fue la tiara de la familia real Orléans-Braganza, una pieza histórica subastada en Christie’s en 2018 y actualmente perteneciente a V Muse Jewellery. Con diamantes montados al estilo Belle Époque, la pieza resaltó el aire aristocrático y atemporal de su estilismo.
© ©Le Bal / Borde / Moreau / BestimageLady Araminta Spencer-Churchill: un collar de esmeraldas
Heredera directa del linaje Marlborough, hija del 12º Duque y bisnieta política de Isabel II, Lady Araminta combina su vida entre caballos, competiciones ecuestres y la vida social británica. Debutó con un diseño de Armani Privé, acompañada por el barón Nicholas von Perfall. Para completar su look llevó el collar Orléans Emerald, un impresionante collar de esmeraldas que ha pasado por varias debutantes memorables: Sienna Gallienne en 2024, Hannah Husain en 2023 y la princesa Hélène d’Orléans en 2022. Una de las piezas más codiciadas del baile.
© ©Le Bal / Borde / Moreau / BestimageGabrielle Janssens de Balkany: un conjunto con historia
Hija de Olivier Janssens y Elisabeth de Balkany y nieta de la princesa Maria Gabriella de Saboya, Gabrielle representa una de las estirpes reales italianas más relevantes. Con un vestido de Luisa Beccaria y acompañada por su hermano Thomas, la debutante protagonizó uno de los looks más comentados. Lució una tiara Belle Époque de zafiros y diamantes, pieza que ha pasado por subastas de Bonhams y Christie’s en las últimas décadas y que ha sido recientemente adquirida por V Muse Jewellery. También llevó los pendientes de diamantes de Marie Thérèse de Savoie, duquesa de Parma, prestados por la firma y procedentes de la famosa subasta de Bourbon-Parma de Sotheby’s en 2018. Lo más llamativo: el legendario collar de zafiros de la reina María José, joya heredada por su abuela, la princesa Maria Gabriella, y considerada una de las más valiosas del joyero italiano.
© ©Le Bal / Borde / Moreau / BestimageReagan Sacks: arte en diamantes
La hija del magnate tecnológico David Sacks y de la empresaria Jacqueline Sacks representó la nueva élite californiana. Con un look de Schiaparelli Alta Costura y acompañada por el joven heredero farmacéutico Jason Schwarz, Reagan llevó una magnífica selección de joyas. La tiara de diamantes Köchert de la archiduquesa María Ana de Austria y el collar de diamantes del duque de Berry que se subastó en la venta Royal Jewels from the Bourbon Parma Family de Sotheby’s en 2018.
© ©Le Bal / Borde / Moreau / BestimageEugénie de Hohenzollern: escondida en el recogido
Hija del príncipe Albert y la princesa Natalia de la icónica dinastía alemana, Eugénie es estudiante de moda en el Instituto Marangoni de París. Para su debut optó por un vestido creado por Édouard Vermeulen y desfiló acompañada por el conde Ascanio di Carpegna Brivio. La princesa llevó la tiara floral Couteulx, un diseño de diamantes con motivos florales que había sido lucido por la condesa Lara-Cosima Henckel von Donnersmarck en las dos ediciones anteriores del baile.
