Después de acaparar todas las miradas en París Fashion Week, Meghan Markle reapareció ayer en Estados Unidos junto al príncipe Harry. Concretamente, se desplazaron hasta Nueva York con motivo de la gala World Mental Health Day, organizada por Project Healthy Minds, donde fueron reconocidos por su labor en favor de la salud mental y la seguridad digital, una causa que ambos han convertido en uno de los pilares de su labor filantrópica. Para esta cita, la duquesa de Sussex eligió un discreto look negro que, sin embargo, esconde más mensajes de los que parece.
© GTRESPoniendo el foco en el acto
Ya en un primer vistazo a las fotos del evento, vemos que, sin duda alguna, Meghan ha apostado de manera muy intencionada por el minimalismo. Los looks de figuras públicas como ella están absolutamente medidos al detalle, puesto que son una auténtica herramienta de comunicación no verbal. Es cierto que siempre le han gustado los diseños sencillos, de líneas depuradas y tonos neutros, y ha huido de estampados llamativos. Sin embargo, en alguna cita destacada sí que ha querido innovar y elegido colores como el rojo o diseños que agregan algún detalle impactante, como sobrefaldas, mangas potentes o escotes en la espalda.
© GTRESTras el revuelo que provocó su regreso a Europa la semana pasada, y teniendo en cuenta que su reaparición tras él ha tenido lugar en un encuentro relacionado con un tema sensible con el que tanto ella como su marido se muestran siempre muy concienciados, encaja totalmente que haya buscado que su estilismo pase a un segundo plano. Está claro que se va a hablar de él igualmente, pero al menos ella no será la responsable ni podrán acusarla de que busca el foco, algo que ha ocurrido anteriormente.
© GTRESHomenaje a Armani
Para conseguir este minimalismo sin renunciar a la elegancia ha elegido uno de los conjuntos más atemporales que existen, el traje negro. Pero no cualquiera. Sabemos que Meghan no da puntada sin hilo, así que, por una parte, ha querido rescatar uno de su armario para evitar aparentar ostentación, y, por otra, ha elegido concretamente uno firmado por Giorgio Armani a modo de homenaje al maestro italiano, fallecido hace unas semanas.
© GTRESSe trata de un favorecedor set compuesto por una chaqueta de esmoquin entallada, la cual se cierra con un gran y único botón frontal, y un pantalón ceñido de tiro alto y bajo acampanado que alarga la figura y genera un efecto de 'piernas infinitas'. Ha completado con un bolsito de mano satinado y salones de ante con puntera afilada y tacón ancho de la misma firma.
© Getty ImagesUna pareja conectada también por la moda
Por otra parte, el hecho de que tanto Harry como Meghan hayan elegido trajes negros para esta gala (recordemos que al príncipe le encantan los looks en gris y otros tonos claritos) proyecta una imagen de unidad. Los rumores en torno a su relación llevan acompañándoles desde su inicio, así como las críticas hacia ambos, en solitario o conjunto. Llegar de la mano, sonrientes y cómplices tanto a nivel de actitud como de moda, refleja su sintonía y les muestra ajenos a toda habladuría.
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