Jornada histórica en Luxemburgo, país que ha comenzado el día con la abdicación del Gran Duque Enrique y la proclamación de Guillermo como nuevo Gran Duque en un emotivo acto y lo ha finalizado mediante una cena de gala en el Palacio Gran Ducal, la cual ha reunido a familias reales y líderes internacionales. Como dicta el protocolo en una cita de este tipo, las invitadas han brillado con sus vestidos largos e impresionantes joyas. Uno de los looks que ha sorprendido ha sido el de Brigitte Macron, quien se ha saltado sus propias reglas y se ha mimetizado con las royals europeas.
Si repasamos los estilismos de la Primera Dama de Francia en eventos similares a los de hoy, comprobamos que casi siempre suele apostar por el color blanco, su absoluto preferido junto con el azul. Sin embargo, hoy ha dejado a un lado su paleta preferida en favor de una más otoñal, gracias a la que ha conectado con otras de las invitadas más destacadas.
Sí se ha mantenido fiel a su pasión por los vestidos de líneas depuradas y corte minimalista, aunque, para aportar un toque de modernidad y originalidad, ha elegido uno decorado con un patrón en malla de red cuajado de pequeñas piedras metalizadas sobre el escote y mangas. Lo ha combinado con un bolso estilo cofre plateado y salones a juego, así como con un pasador de marfil que recogía su melenita rubia.
El color de moda entre las royals
Ha llamado la atención la cantidad de estilismos en tono burdeos que hemos visto en las últimas horas, tanto en la cena de gala como en los actos de la mañana. Es cierto que se trata de un color de pura tendencia, ideal especialmente en la temporada de otoño, además de ser muy elegante y favorecer a todo tipo de pieles y cabellos, pero no deja de ser curioso que, en una misma jornada, haya enamorado a tantas asistentes a un mismo evento.
Matilde de Bélgica ha apostado por él en sus dos looks de hoy. Para el banquete, ha optado por un vestido largo en un tejido de microplisados con drapeados a la cintura y detalles de encaje y pedrería en escote y mangas. Anteriormente, eligió un estilismo más sobrio protagonizado por un diseño midi de cuello redondeado, escote crochet, manga larga y falda en línea 'A' que acompañó de complementos a tono.
Amalia de los Países Bajos y María Teresa de Luxemburgo también apostaron por tonalidades burdeos, cada una en una gama diferente. La hija de los reyes de Holanda llegó un conjunto de vestido midi y capa de lana. Mientras la pieza inferior contaba con un tono más bien rojizo, la prenda exterior era más oscura, granate. Un tono que ha sido tendencia todo 2025 y que, parece, continuaremos llevando el próximo invierno.
Por su parte, la gran duquesa, una de las anfitrionas del día, ha elegido para su primer look del día un vestido muy oscuro, casi violeta, con un diseño minimalista con capa incorporada, de largo hasta el tobillo y un original escote horizontal. Le ha sumado un clutch dorado, zapatos de tacón kitten en beige y grandes pendientes con piedras malva y pulsera a juego.