Las vacaciones comienzan a llegar a su fin para todos, royals incluidas. Si la semana pasada era Mary de Dinamarca quien retomaba sus compromisos oficiales, y lo hacía reciclando el traje de lino perfecto para el verano, ahora viajamos hasta Jordania para ver a su Reina en un nuevo acto oficial. Ha sido en la ciudad de Al Salt, a 29 kilómetros de Ammán, donde la mujer del rey Abdalá II ha reaparecido con el look de invitada gracias al que lleva triunfando desde la boda de los Reyes de España, en 2004. ¿Recuerdas cuál es la icónica combinación que lució hace más de dos décadas?
El look icónico de Rania de Jordania
Camisa blanca y falda larga: ese fue el look con el que la monarca jordana se convirtió en la invitada más elegante en la boda de nuestros reyes, y el mismo dúo que, 21 años después, ha recuperado en su país. En esta ocasión, además, se ha decantado por una falda en un color que, hace años, estaba casi prohibido en la moda, el amarillo, pues era símbolo de mal fario, según los supersticiosos. Rania ha desafiado a la suerte con una increíble pieza amarillo canario de aire boho, con cristales en la cintura y bordados a lo largo en blanco y dorado a lo largo de toda la tela.
Se trata de la falda Camille de la firma italiana Emporio Sirenuse, cuyas prendas están inspiradas en el espíritu del hotel Le Sirenuse de Positano, en la Costa de Amalfi. ¿La habrá comprado en sus vacaciones? La falda también está disponible online, si bien va camino de agotarse, donde puedes conseguirla a mitad de precio: está rebajada de 1.050 euros a 525. Confeccionada 100% en algodón italiano, es una prenda perfecta para ser la más elegante todo el verano, ya sea en tus vacaciones (combinada, por ejemplo, con un top sin mangas) como en el trabajo, tal y como ha hecho Rania.
Una sencilla blusa blanca, con cuello clásico y manga francesa abullonada -idónea para días de calor- ha sido todo lo que ha necesitado para conseguir un look especial, original y muy elegante. Además, la reina de Jordania ha llevado unos zapatos blancos estilo mule con puntera afilada y tacón cómodo, un minibolso de mano de color cámel -como los que adora Kate Middleton- y un chal a juego de este. Tampoco han pasado desapercibidos otros tres detalles que son supertendencia: sus gafas de sol cuadradas, su manicura blanca y un smartwatch que prueban que la monarca jordana está a la última
Un look que marcó tendencia
El 22 de mayo de 2024, el entonces príncipe Felipe se casaba con Letizia Ortiz Rocasolano en una boda que todo el país siguió a través de la televisión. Ni la lluvia ni el cielo gris de aquel día pudieron empañar la aparición de Rania de Jordania en la Catedral de la Almudena, en Madrid. Con su blusa blanca y su falda larga malva con encaje, nos dejó una imagen para el recuerdo que ha marcado tendencia durante más de dos décadas. Ese look de Givenchy Alta Costura de estética años 70 ha sido referencia de editores y estilistas durante estos 21 años, y también ha servido de inspiración a otras royals como la reina Letizia, que ha llevado esa elegantísima combinación en más de un acto oficial.