Mientras Amanda Anisimova e Iga Świątek se preparaban para disputar una de las finales más esperadas del tenis femenino, todas las miradas, al menos, las del royal watching, estaban puestas en otro icono del césped: la princesa de Gales. Y no ha decepcionado. Kate Middleton ha aparecido en la pista central de Wimbledon vestida de blanco de pies a cabeza, en un conjunto que rinde homenaje a la estética del torneo y a su papel institucional como patrona del All England Lawn Tennis and Croquet Club.
La princesa, gran aficionada al tenis y habitual de la Royal Box, eligió para la ocasión un conjunto muy parecido al del año 2023, acompañado del tradicional lazo morado y negro que vincula cada presencia real con la historia de Wimbledon. El look, compuesto por una chaqueta blanca estructurada y una falda plisada a juego, desprendía ese tipo de sobriedad sofisticada que Kate ha convertido en su firma personal.
El conjunto blanco, un clásico del vestuario de Kate en actos públicos durante el verano, le permite rendir homenaje al dress code de Wimbledon, que exige el blanco estricto para los jugadores y que, en el caso de la realeza, se convierte en una forma de identificación respetuosa con la tradición del torneo.
Un look muy parecido al de 2023
Este gesto de repetir look no es casual. Además de transmitir un mensaje de continuidad y discreción, subraya el respeto institucional de Kate hacia Wimbledon, un torneo con el que mantiene una relación especial. En 2023 lució un diseño de la marca británica Self-Portrait, en color verde. Este año ha optado por un conjunto casi idéntico pero en color blanco y con un cuello de estilo mao y un cinturón más ancho.
A diferencia del año pasado, en esta ocasión la princesa ha asistido sola. En 2024, la acompañaban su hermana Pippa Middleton y su hija, la princesa Charlotte, que protagonizó un tierno momento al mirar a su madre con admiración desde el palco. En el Royal Box sí se ha podido ver a otros invitados relevantes como el atleta Sir Mo Farah, el director de cine Noah Baumbach y la directora Greta Gerwig, el actor Stanley Tucci, el triple campeón olímpico Adam Peaty con su pareja, y Holly Ramsay, hija del chef Gordon Ramsay.