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Lo ha vuelto a hacer. Manuela Villena, ‘primera dama’ de Andalucía, consigue en cada aparición pública no solo ser profeta de su tierra, sino demostrar que la moda se puede adaptar a la perfección a cada evento. Tanto si se trata de una cena con los reyes de España, don Felipe VI y doña Letizia, como si acude a El Rocío, la esposa del Presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla, su exquisito gusto le lleva a reinterpretarse adoptando estilos muy diferentes entre sí. Y así lo ha demostrado, ayer 11 de julio en Madrid, durante la entrega de los Premios de Innovación Social 2025, que organizaba la Fundación Bidafarma de la que ella es gerente.
© Bidafarma
Para esta gala que reconocía la labor de entidades que trabajan por mejorar la salud y el bienestar de los colectivos más vulnerables, Manuela Villena se subió al escenario y habló a todos los presentes. “Estos galardones y proyectos que premiamos hoy nos conectan con lo esencial del trabajo de nuestra Fundación que es estar cerca de quienes más lo necesitan a través de iniciativas que cuidan, que innovan, que acompañan y que transforman”, precisó la granadina. Y si sus palabras recibieron la ovación de los allí presentes, también de ‘matrícula de honor’ fue su look.
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© BidafarmaUn vestido de la jerezana Inés Domecq
En concreto, Manuela Villena quiso decantarse por una creación de la firma IQ Collection, tras la que se encuentra la jerezana Inés Domecq. De hecho, el pasado mes, fue este apreciado sello por las invitadas más innovadores el que eligió para encontrarse con el rey Felipe VI y la reina Letizia en el Real Alcázar de Sevilla con motivo de la V Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo de Naciones Unidas. Y si ese día impactó con un vestido arquitectónico, que dejaba al descubierto los laterales del torso y se adornaba en el frontal con botones joyas, ayer, prefirió buscar una imagen más relajada con una creación veraniega con guiño romántico.
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© IQ CollectionHombros realzados y bordados de rosas
En concreto, lució un vestido de encaje blanco sobre forro beige, que presenta cuello a la caja, con marga corta realzada en corte arquitectónico tan característico de la firma, cuerpo ligeramente entallado, falda midi acampanada y cremallera invisible en la espalda. Sin embargo, lo que llama especialmente la atención, más allá de su elegante patrón, son los delicados bordados de rosas que cubren esta elección, bautizada como modelo Rose (380 euros). Sin duda, se trata de una apuesta que gustará a las invitadas más bucólicas que buscas una forma original de lucir estampado floral. Buscando una fórmula muy relajada para combinarlo, Manuela Villena lo acompañó de unos pendientes con seis pequeños aros y unas sandalias de tiras beige, un complemento que se convierte en un perfecto fondo de armario, pues pega con todo.
