El sujetador es el nuevo top. Sí, os lo decimos de forma clara, “sin anestesia”, con seguridad y sin tapujos. A nosotras nos ha costado más asimilarlo, pero lo cierto es que lo mejor es afirmarlo en alto, rápidamente y sin pensarlo demasiado —como quien se quita un esparadrapo del tirón—. Pasado el susto inicial, todo vuelve a su cauce, os lo aseguramos. Volvamos a repetírnoslo, por eso de interiorizarlo: el sujetador es el nuevo top. En efecto, no hablamos de hacer de él un complemento más dentro de nuestro outfit que se deja entrever bajo una camisa ligera o un suéter de punto fino, sino de lucirlo con todas las de la ley expresamente a la vista a modo de bandeau. Y es que, fruto de la revolución lencera en la que estamos inmersas, existen firmas y celebrities que se han empeñado en reafirmar que existen sujetadores y bralettes nacidos para ser mostrados, cuyo diseño y detalles merecen ser sacados a la luz del día. Ese sería el caso de este controvertido modelo que trae a algunas de las mayores influencers de cabeza.
Cuando tienes un número reducido de firmas entre las que elegir por motivo de gustos o de presupuesto, como nos pasa a la mayor parte de los “mortales”, normalmente apuestas por el clásico “sota, caballo, rey” y no es difícil acabar coincidiendo con tus propias amigas en las prendas de ropa que os habéis comprado esa temporada. Sin embargo, cuando el amplio universo de las firmas de moda se abre ante ti y sucumbes exactamente a la misma prenda que otras it-girls y celebrities —con lo poco que le ha de gustar esto a las influencers— es que algo está sucediendo con ese ítem en concreto. Pues es precisamente el caso de este sujetador con ínfulas de top que Philosophy di Lorenzo Serafini creó para su campaña otoño-invierno 2017-2018, a juego con un pantalón de talle alto con el que se conjugaba a la perfección. Un modelo que convenció a Chiara Ferragni para lucirlo con una minifalda de piel recubierta por tachuelas y una bomber negra, pero no fue a la única.
El diseño es complejo, todo hay que decirlo. Se trata de un sujetador de tipo balconet que procura realzar el busto con la máxima sofisticación. Las copas están confeccionadas en un tejido con print a cuadros blanco y negro, sobre el que se coloca un ribete aterciopelado a contraste. No contentos con este detalle, el mismo tejido se utiliza para realizar los tirantes y una última banda que cruza el escote, embellecida con una lazada idéntica a la que vemos en la parte central del pecho. Todo ello, aderezado además con brillantes que le dan un aspecto más preciosista. ¿Curioso no? Pues a los ángeles de Victoria’s Secret los ha conquistado, y sino que se lo digan a Sara Sampaio y a Stella Maxwell. Mientras la modelo portuguesa se hacía con el conjunto completo de Philosophy, incluyendo en su outfit el pantalón; Stella dejaba que se insinuase bajo un abrigo de pelo en tono níveo, en un juego de contrastes y texturas.
Pero para quien huya de lucir este tipo de prendas totalmente al descubierto, Dove Cameron tiene la solución más “victoriana” en el sentido más literal. A la hora de vestir el sujetador en cuestión, la actriz lo hacía sobre una blusa blanca de estética vintage con cuello alzado provisto de puntilla, manga tulipán y secciones de encaje a lo largo del cuerpo. Sin duda, en el caso de hacerte con un top un bandeau de estas características y de cara a los meses de invierno, es una buena solución y una alternativa de lo más trendy a la hora de evitar mostrar demasiada piel o de combatir el frío inminente.
Y después de todo esto ¿qué hemos sacado en conclusión? Pues, además de que las famosas acaban teniendo los mismos problemas de coincidencias y repeticiones que nosotras; también que claramente los sujetadores ya no son lo que eran, su estética ha evolucionado considerablemente y su funcionalidad también, por lo que prometen dar mucha guerra a lo largo de la temporada. Y a ti, ¿te convence su nueva función?
